El Vaticano confirmó la expulsión del sacerdote marista Abel Pérez, uno de los principales acusados por abusos sexuales al interior de la congregación.

Lo anterior, justo el día en que las principales autoridades de dicha congregación se reunieron con las víctimas de abusos en Santiago, a quienes ofrecieron perdón.

Se trata de la concreción de una solicitud que había realizado hace algunos meses el sacerdote Ernesto Sánchez, y que recibió la venia del Vaticano, según informó hoy el provincial de la congregación, Saturnino Alonso Ortega, en un comunicado.

El vicario general de los Maristas, Luis Gutiérrez, leyó una declaración en la que ofrecieron perdón y comprometieron apoyo, reparación y verdad, y llevar ante la justicia a quienes hayan perpetrado estos abusos.

Un perdón que según una de las víctimas de estos abusos, Isaac Givovich, causa más daño al no traducirse en hechos concretos.

También agregó que esperan reunirse con el arzobispo de Malta, Charles Scicluna, y el sacerdote Jordi Bertomeu, para plantearles nuevos hostigamientos: entre ellos, acoso laboral contra el hermano de una de las víctimas.

Otra de las víctimas presente, Gonzalo Dezerega, lamentó la demora con la que la congregación Marista los escuchó, a diferencia de otras instancias de la iglesia.

Finalizó señalando que espera un trabajo en equipo para sacar la verdad y dar la reparación a las víctimas y sus familias.