Giorgio Martelli declaró este lunes por dos horas ante el fiscal Carlos Gajardo, quien investiga el origen y destino de dos facturas por 50 millones de pesos que pagó Comercial Eccsa, controladora de Ripley, a Asesorías Credo Limitada, sociedad que aparece en el registro del Servel como proveedora de la campaña de Michelle Bachelet en el 2013.

En un correo entre Lázaro Calderón, uno de los principales ejecutivos de Ripley, y un ejecutivo de la empresa de publicidad, apareció mencionado Martelli, lo que motivó esta diligencia.

El geógrafo de profesión, llegó hasta el edificio de la fiscalía, ubicado Nuñoa, a bordo de una bicicleta. En el lugar lo esperaban sus abogados Claudio Public y Cristián Arías, quien no aportó mayores detalles de la diligencia.

El fiscal Gajardo en tanto, solo confirmó que Martelli prestó declaración como imputado.

En la declaración, a la que tuvo acceso Radio Bio Bio luego que no fuera declarada bajo reserva, el recaudador del oficialismo identificó al exministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, y al expresidente de Endesa, Jorge Rosenblut, como las personas que dirigían su trabajo para canalizar los aportes de empresas a la campaña de la actual mandataria.

Martelli en su declaración señala que “efectivamente puedo deducir que esta operación podría haber tenido que ver con financiamiento para la campaña presidencial de Michelle Bachelet, pero no me consta tampoco”.

De ahí, el imputado relató que su rol fue contactar a un ejecutivo de Ripley, Miguel Nuñez, con uno de los dueños de asesorías Credo, Diego Perry.

“Las personas que me pidieron participar en el tema del financiamiento fueron Jorge Rosenblut y Rodrigo Peñailillo (…) a veces me entrevistaba con las personas que estaban a la cabeza de la empresa y en otras ocasiones con personas que estaban en rangos inferiores. Eso lo definían Jorge Rosenblut y Rodrigo Peñailillo”, aseguró.