Vladimir Putin ascendió a un importante funcionario del Servicio Penitenciario Federal de Rusia a sólo días de la muerte de Alexéi Navalny.

Según reporta Europa Press, el mandatario ruso firmó un decreto presidencial para otorgar el rango especial de coronel general al subdirector del servicio, Valeri Boyarinev.

Se trata de una distinción con la que destaca la labor que ha llevado a cabo el funcionario del organismo.

Esto ocurre apenas cuatro días después de que muriera en extrañas circunstancias en la penitenciaría IK-3 de la localidad de Jarp (distrito autónomo Yamalo-Nénets) Alexéi Navalny, un conocido líder opositor a la gestión de Putin.

De acuerdo a la citada agencia, Boyarinev se desempeña en el servicio desde julio de 2022 supervisando la Dirección Principal Operacional y la Dirección Principal de Apoyo a las Actividades de las Unidades Operacionales.

No obstante, ha sido acusado por supuestamente haber estado involucrado en la muerte de Navalny, lo que no ha sido confirmado. A su vez, opositores al Kremlin afirman que bajo su administración cientos de ucranianos han sido víctimas de torturas.

El País detalla que Boyarinev fue quien ordenó restringir la comida en la prisión en donde estaba recluido el disidente ante de ser llevado a la cárcel antártica en la que murió.

“Una recompensa personal por parte de Putin por tortura y asesinato”, acusó el director de la Fundación Anticorrupción, Iván Zhdanov.

Junto con el subdirector del servicio, otros generales de la mayoría de los organismos de seguridad del Kremlin fueron ascendidos.

Recordemos que Navalny murió repentinamente el viernes en la cárcel ubicada en el ártico. “Se le practicaron los necesarios procedimientos de reanimación, que no dieron ningún resultado”, indicó esa jornada el Servicio Penitenciario Federal.

“Los médicos de urgencias constataron la muerte del condenado. Se están estableciendo las causas del fallecimiento”, añadió.