Grecia, Francia, Italia y Chipre, países miembros de la Unión Europea, comenzaron este miércoles maniobras militares conjuntas en el Mediterráneo oriental, donde las tensiones greco-turcas se han agravado últimamente a causa de la delimitación de áreas marítimas ricas en hidrocarburos.

“Chipre, Grecia, Francia e Italia acordaron desplegar una presencia conjunta en el Mediterráneo oriental dentro de la Iniciativa Cuatripartita de Cooperación (SQAD)”, informó este miércoles el ministerio de Defensa griego.

Los ejercicios tendrán lugar hasta el viernes en el este del Mediterráneo, al sur y suroeste de Chipre, según una fuente militar citada por la Agence France-Presse.

En paralelo, Turquía anunció que también efectuó ejercicios militares, pero en conjunto con un destructor de Estados Unidos.

“Las fragatas turcas TCG Barbaros y TCG Burgazada han realizado ejercicios navales con el destructor estadounidense Winston S. Churchill en el Mediterráneo oriental el 26 de agosto”, explicó por su parte el ministerio de Defensa turco mediante un tuit.

Tensiones al alza

Francia advirtió este miércoles a Turquía que el Mediterráneo oriental no puede constituir “un terreno de juego” para las “ambiciones” nacionales.

“El Mediterráneo no debe convertirse en un terreno de juego de las ambiciones de algunos. Es un bien común”, tuiteó la ministra de las Fuerzas Armadas francesa, Florence Parly, confirmando el comienzo de estas maniobras militares conjuntas.

De inmediato, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, advirtió que Turquía “no hará ninguna concesión” en la defensa de sus intereses gasíferos en el Mediterráneo oriental, e instó Grecia a evitar cometer cualquier “error” que la lleve a su “perdición”.

El ministerio griego, por su parte, indicó que las fuerzas navales y aéreas chipriotas, griegas, francesas e italianas se ejercitarán en el Mediterráneo oriental “en el marco de Iniciativa Cuatripartita de Cooperación (SQAD)”.

“Las tensiones y la inestabilidad en el Mediterráneo oriental han acrecentado las disputas respecto a cuestiones sobre el espacio marítimo”, de acuerdo a un comunicado del ministerio heleno.

El descubrimiento en los últimos años de importantes yacimientos gasíferos en el Mediterráneo oriental ha suscitado fuertes tensiones entre Ankara y Atenas, que se disputan ciertas áreas marítimas.

“Las tensiones y los intentos de desestabilización del Mediterráneo oriental (…) han alcanzado un tope”, señaló de su lado en un comunicado el ministerio de Defensa chipriota.

Esfuerzos diplomáticos

En este contexto de tensiones, Alemania, que ocupa la presidencia semestral rotativa de la Unión Europea, abogó el martes en Atenas y Ankara por el “diálogo” y la “desescalada”.

“Nadie quiere solucionar este diferendo militarmente”, declaró el jefe de la diplomacia alemana, Heiko Maas, subrayando que “existe una voluntad de diálogo de ambas partes”.

Desde el 10 de agosto, Turquía ha desplegado en la zona al buque sísmico “Oruç Reis” acompañado de fuerzas navales, provocando la cólera de Grecia, que respondió enviando buques de su Armada.

De acuerdo al ministerio griego, esta iniciativa cuatripartita “contribuirá a una presencia aeronáutica militar reforzada en la región, sobre la base del entendimiento recíproco, el diálogo y la cooperación”.

La primera etapa de esta iniciativa común, denominada “Evnomia”, es la concentración de medios aéreos y navales, así como efectivos de estos cuatro países en el sureste del Mediterráneo.

Estas maniobras demuestran “el compromiso colectivo y absoluto de cuatro países europeos para la aplicación del derecho del mar (UNCLOS) y el derecho internacional vigente”, subraya el texto.

El ministerio griego afirma que “la vía diplomática continúa siendo el medio privilegiado para solucionar las cuestiones a nivel bilateral y europeo simultáneamente, puesto que el diálogo puede conducir a la desescalada de las tensiones en la región”, de acuerdo al mismo comunicado.

Atenas asegura que el despliegue del “Oruc Reis” con el objetivo de realizar prospecciones petroleras frente a la pequeña isla griega de Kastellorizo, en el mar Egeo, en “la plataforma continental griega”, es “una violación a su soberanía”.

Muy cercana a las costas occidentales de Turquía, esta isla cristaliza la cólera turca porque la soberanía griega priva a Turquía de decenas de miles de km2 de fondos marinos ricos en gas.

Grecia ha comenzado un maratón diplomático con sus socios europeos y Estados Unidos para presionar a Turquía.

El ministro de Exteriores griego, Nikos Dendias, señaló que está “dispuesto al diálogo”, pero no “bajo un régimen de amenazas”.

Su homólogo turco, Mevlut Cavusoglu, respondió que Ankara “está lista para un diálogo sin condiciones previas, para lograr un intercambio justo”.

La disputa greco-turca estará en el orden del día de una reunión de ministros de Relaciones Exteriores de la UE, jueves y viernes en Berlín.