Turquía afirmó el martes que está dispuesta a dialogar con Grecia ante las crecientes tensiones en torno a exploraciones de hidrocarburos en el Mediterráneo oriental, sin condiciones previas.

“Estamos dispuestos a abrir negociaciones sobre un reparto justo, pero sin condiciones previas. No puede haber precondiciones de parte de Grecia”, explicó el ministro de Relaciones Exteriores turco tras una entrevista con su homólogo alemán, Heiko Maas.

La situación entre ambos países está en un punto “muy crítico”, advirtió el ministro alemán.

“Nadie quiere resolver este diferendo por medios militares”, aseguró a la prensa. “Ambas partes tienen voluntad de diálogo”, añadió.

Alemania, que ostenta actualmente la presidencia de la Unión Europea, intenta mediar entre ambos países, aliados en el seno de la OTAN.

En los últimos años se han producido diversos descubrimientos de yacimientos de hidrocarburos en el Mediterráneo oriental, donde Grecia y Turquía mantienen una inestable vecindad.

El ministro de Exteriores alemán visitó primero Atenas y luego Estambul este martes, el mismo día en que ambos países organizaban respectivamente ejercicios militares en la zona.

Cavusoglu precisó que a demanda de Alemania, Ankara había suspendido temporalmente sus actividades de exploración en julio, como un “gesto” para facilitar el diálogo.

Pero la firma entre Egipto y Grecia de un acuerdo que delimitaba sus respectivas fronteras marítimas demostró que Atenas “no era sincero”, explicó el ministro.

“Quisiera aconsejar a Grecia que abandone esa actitud de niño malcriado”, advirtió Cavusoglu. “No podrán obtener nada mediante el apoyo de la UE. Turquía está dispuesta a hacer lo que sea necesario sin dudarlo”.

Ankara decidió el domingo prolongar la presencia de su barco de exploración Oruç Reis en una zona reivindicada por Atenas hasta el 27 de agosto, lo que provocó el anuncio, primero por parte de Grecia y luego de Turquía de ejercicios militares.