El gobierno británico anunció este lunes sanciones contra 49 individuos y organizaciones como parte de un nuevo mecanismo establecido por el Reino Unido para castigar de forma autónoma las violaciones de los derechos humanos tras su salida en enero de la Unión Europea.

La lista de entidades cuyos activos serán congelados incluye a 25 rusos acusados de la muerte del abogado Serguéi Magnitsky en 2009 y a 20 saudíes sospechosos de participar en el asesinato del periodista Jamal Khashoggi en Estambul en 2018, anunció el ministro de Relaciones Exteriores, Dominic Raab, ante el Parlamento.

Completan la lista dos generales birmanos de alto rango “implicados en la violencia sistemática y brutal contra el pueblo rohinyá y otras minorías étnicas” y “dos organizaciones involucradas en el trabajo forzado, la tortura y el asesinato que tiene lugar en los gulags de Corea del Norte”, precisó la cancillería.

Con este nuevo mecanismo de sanciones, las autoridades británicas buscan “evitar que los implicados en graves violaciones de los derechos humanos entren en el Reino Unido, muevan dinero a través de nuestros bancos y se beneficien de nuestra economía”, afirmó Raab.

Régimen post-Brexit

El régimen permitirá que el Reino Unido se focalice en personas y organizaciones de todo el mundo, a diferencia del régimen convencional de sanciones geográficas que sólo se dirige a un país.

Es la primera vez que Londres impone sanciones por violaciones de los derechos humanos bajo un régimen exclusivamente británico, tras haber abandonado oficialmente la UE el 31 de enero.

Este nuevo sistema “permitirá al Reino Unido trabajar de forma independiente con aliados como Estados Unidos, Canadá, Australia y la Unión Europea”, afirmó Raab.

El régimen británico de sanciones se aplicará a “quienes faciliten, inciten, promuevan o apoyen esas violaciones, así como a quienes se beneficien financieramente de las violaciones de los derechos humanos”, explicó el ministerio en un comunicado.

En particular, podrían dirigirse a “quienes cometen asesinatos ilegales de periodistas y trabajadores de los medios de comunicación, o actos motivados por la religión o las creencias”.

Elogios y críticas

El jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Mike Pompeo, elogió este lunes a Reino Unido por imponer sanciones para castigar violaciones de derechos humanos con un nuevo mecanismo tras su salida de la Unión Europea. “Este régimen de sanciones marca el comienzo de una nueva era para la política de sanciones del Reino Unido y la cooperación entre nuestras dos democracias”, dijo Pompeo en un comunicado.

Rusia, por su parte, amenazó con responder a las sanciones “hostiles” anunciadas por Londres. “Rusia se guarda el derecho de adoptar medidas de represalia en relación con la decisión hostil del Reino Unido”, indicó en un comunicado la embajada rusa en la capital británica.