Un amplio operativo se ha desplegado en Bolivia para dar con el paradero de Sebastián Marset, un narcotraficante uruguayo que además es requerido por la Justicia en Uruguay, Brasil, Paraguay y la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA, en inglés).
Tal como detalla Agencia EFE, Marset -quien dirigía un equipo de fútbol de la segunda división boliviana en el que incluso jugó- es sindicado como el jefe de una “organización criminal” que posee “gran capacidad económica”.
El sábado un policía de Bolivia fue secuestrado por la agrupación delictual liderada por el uruguayo. Luego de unas horas el uniformado fue liberado, motivando así diversos operativos para encontrar a Marset.
De acuerdo a la citada agencia, durante dicha jornada se movilizaron a 2.250 efectivos quienes llevaron a cabo seis allanamientos.
Durante el domingo se realizaron otros operativos en Santa Cruz de la Sierra, en donde los agentes ingresaron a una lujosa vivienda en busca de pistas que ayuden a dar con el narcotraficante.
Fue así como se logró incautar varios automóviles, más de 16 teléfonos móviles, 17 fusiles, una pistola, 1.915 municiones y chalecos antibalas. Pese a que se detuvo a algunas personas, no pudieron encontrar al líder de la banda.
¿Quién es Sebastián Marset?
Sebastián Enrique Marset Cabrera, de 32 años, cuenta además con órdenes de captura de la Europol e Interpol. Específicamente, es buscado por “operaciones vinculadas con el tráfico de estupefacientes hacia Europa”.
A su vez, en Uruguay la Fiscalía está investigando la entrega de un pasaporte en 2021 al narcotraficante para que pudiera fugarse de los Emiratos Árabes Unidos, en donde fue detenido por usar documentación paraguaya falsa.
Su nombre además está catalogado como uno de los autores intelectuales del asesinato en mayo de 2022 en Colombia del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, quien se dedicaba a perseguir a las mafias criminales.
El ministro de Gobierno (Interior) boliviano, Eduardo del Castillo, señaló que el uruguayo entró a Bolivia en septiembre de 2022, agregando que se encuentra junto a su esposa y sus tres hijos menores de edad en el departamento de Santa Cruz.
El titular de la cartera explicó que el uruguayo pudo eludir a las autoridades gracias a sus “múltiples identidades”, haciéndose pasar por brasileño, paraguayo y boliviano.
Si bien aún no hay novedades sobre su paradero, Del Castillo se mostró confiado en lograr su captura “en las próximas horas”.
El medio Perfil detalla que comenzó a llamar la atención de la justicia uruguaya en diciembre de 2012, cuando se inició una investigación en su contra por ayudar a los responsables de un delito. “Diez meses después, fue procesado por tenencia de estupefacientes, lo que fue su primera incursión en el mundo del narcotráfico”, consigna.
Junto a Juan Domingo Viveros Cartes, tío del ex presidente paraguayo Horacio Cartes, ingresó a Uruguay más de 450 kilogramos de marihuana en una avioneta piloteada por el propio Viveros Cartes. Tras ser sorprendido, admitió ser el destinatario de la droga incautada.
Durante su paso por el Penal de Libertad, en Uruguay, pudo ampliar sus redes de contacto, relacionándose con otros narcotraficantes. Tras salir en 2018 comenzó a usar identidades falsas.
“El perfil del delincuente uruguayo también incluye vinculaciones con el ámbito deportivo: es futbolista profesional e invirtió en equipos como Deportivo Capiatá y Rubio Ñu, mecanismos mediante los cuales lavó dinero”, consigna Perfil.
