Estados Unidos pidió el lunes una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU sobre Venezuela, tras la represión violenta de manifestantes el fin de semana durante un intento de ingresar ayuda humanitaria extranjera al país.

La reunión del Consejo, prevista en principio para este martes, será abierta, indicaron diplomáticos.

Cuatro personas murieron el fin de semana en la frontera de Venezuela con Brasil en choques entre fuerzas del presidente Nicolás Maduro y civiles que buscaban la entrada de la ayuda, según la ONG Foro Penal. Cientos más fueron heridos en enfrentamientos violentos en las fronteras con Colombia y Brasil.

En el Consejo de Seguridad de la ONU aguardan discusión dos proyectos de resolución sobre Venezuela presentados a inicios de febrero, uno por Estados Unidos y otro por Rusia.

El proyecto estadounidense llama a facilitar una ayuda humanitaria internacional y a organizar elecciones presidenciales en Venezuela.

El de Rusia denuncia las amenazas de uso de la fuerza contra el gobierno de Maduro, pero no dispone de los nueve votos necesarios para ser adoptado.

El vicepresidente estadounidense, Mike Pence, viajó a Colombia el lunes para participar en el Grupo de Lima, reunido en Bogotá para evaluar la crisis venezolana.

“Esperamos una transición pacífica hacia la democracia. Pero el presidente (Donald) Trump lo ha dejado claro: Todas las opciones están sobre la mesa”, dijo Pence durante su intervención.

Del encuentro participa el opositor Juan Guaidó, reconocido como presidente interino de Venezuela por unos 50 países como Gran Bretaña, Francia, Alemania, España, Brasil, Colombia y Argentina.

En Washington, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció en paralelo sanciones contra cuatro gobernadores de estados venezolanos afines al gobierno de Maduro por obstaculizar la entrega de ayuda.

La situación en Venezuela ha dividido a los Estados miembros de la ONU, donde unos 60 países como Rusia, China, Irán, Corea del Norte, Siria, Cuba, Nicaragua y Bolivia apoyan a Maduro.

Venezuela atraviesa la peor crisis de su historia moderna, con una aguda hiperinflación y escasez de alimentos y medicamentos. Unos 2,7 millones de venezolanos han emigrado desde 2015, según la ONU.

Federico Parra / Agencia France-Presse
Federico Parra / Agencia France-Presse