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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

El Ejército de Corea del Sur disparó advertencias contra un buque mercante norcoreano en la frontera marítima de la Línea Limítrofe Norte, reavivando tensiones entre ambos países en el primer incidente de este tipo en casi tres años. El carguero Toksong cruzó cerca de la isla surcoreana de Baengnyeong antes de retirarse tras los disparos de advertencia. Las fuentes militares sugieren que la intrusión no fue intencional, ya que el buque evitaba colisiones con embarcaciones chinas.

El Ejército de Corea del Sur efectuó disparos de advertencia este viernes tras la incursión de un barco mercante norcoreano en la disputada frontera marítima conocida como la Línea Limítrofe Norte (NLL), un hecho que reaviva las tensiones entre ambos países y que marca el primer incidente de este tipo en casi tres años.

Según informó el Estado Mayor Conjunto (JCS) de Corea del Sur, la embarcación, identificada como el carguero Toksong de 140 metros de eslora, cruzó alrededor de las 05:00 hora local (17:00 horas de Chile del jueves), en las proximidades de la isla surcoreana de Baengnyeong.

Tras la emisión de mensajes de advertencia y la realización de disparos al aire, el navío abandonó las aguas jurisdiccionales.

El JCS subrayó que la respuesta militar se ajustó a los protocolos vigentes y que las fuerzas armadas mantienen un estado de “plena preparación” para actuar “con firmeza ante cualquier situación”. De acuerdo con la agencia local Yonhap, el carguero permaneció cerca de una hora en aguas surcoreanas antes de retomar rumbo al norte.

Fuentes militares señalaron que la intrusión no habría sido intencional, ya que el buque aparentemente modificó su trayecto para evitar colisiones con embarcaciones pesqueras chinas. La última incursión similar ocurrió en octubre de 2022, cuando otro mercante norcoreano se vio obligado a regresar tras maniobras de advertencia de Seúl.

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La LLN, establecida de manera unilateral por Naciones Unidas tras la guerra de Corea (1950-1953), constituye uno de los puntos más sensibles de la península. Pionyang no reconoce la delimitación actual y exige que la línea se sitúe más al sur, lo que explica en gran medida la persistente fricción en la zona.