Las autoridades afganas elevaron este jueves a 56 los muertos por las inundaciones repentinas que han afectado desde hace tres días Afganistán.

Además, se mientras otras 30 personas continúan desaparecidas y un millar de casas resultaron dañadas.

“Hasta ahora han muerto 56 personas, 25 más resultaron heridas. Otras 30 se encuentran desaparecidas después de tres días de lluvias e inundaciones repentinas”, afirmó el portavoz, Tamim Azimi.

Al menos 25 de las 34 provincias afganas se han visto afectadas por las precipitaciones. Los equipos de rescate tratan de localizar a los desaparecidos.

Entre las víctimas se incluyen mujeres y niños, reveló Azimi.

La provincia occidental de Herat es la más afectada por las precipitaciones, donde 22 personas han muerto a consecuencia de unas lluvias.

Cientos de familias se han visto desplazadas y unos mil hogares han resultado dañados o destruidos.

Además las lluvias también han golpeado a los agricultores, con la destrucción de unas 1.620 hectáreas de cultivos y la muerte de 3.000 animales de granja.

Hace un par de días el Departamento de Meteorología de Afganistán advirtió de la posibilidad de fuertes lluvias e inundaciones en 15 de las 34 provincias del país asiático.

Afganistán sufre con frecuencia desastres naturales que ocasionan numerosas pérdidas humanas. Un ejemplo son los corrimientos de tierra en los que murieron 2.000 personas en mayo de 2014 en el noreste del país, una situación agravada por casi dos décadas de guerra.