El golpe de Estado en Birmania por el ejército, que detuvo a la jefa de hecho del gobierno civil, Aung San Suu Kyi y a otros dirigentes, suscitó una avalancha de condenas en todo el mundo.

Recordemos que el ejército anunció, mediante la televisión militar del país, que se harían cargo del Estado por un año, declarando estado de emergencia por ese mismo periodo.

Este domingo 31, el secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), António Guterres, condenó “firmemente” el arresto por el ejército de Aung San Suu Kyi, del presidente, Win Myint, y de otras autoridades civiles.

“La declaración de transferencia de todos los poderes legislativos, ejecutivos y judiciales a los militares (…) representa un duro golpe a las reformas democráticas en Birmania”, manifestó.

América

Desde la Casa Blanca, la portavoz Jen Psaki, señaló en un comunicado que: “Estados Unidos se opone a cualquier intento de alterar el resultado de las recientes elecciones o impedir la transición democrática en Birmania, y tomará acciones contra los responsables si esas medidas no se revierten”.

En tanto, el secretario de Estado, Antony Blinken, pidió “liberar a todos los responsables del gobierno así como a los dirigentes de la sociedad civil y a respetar la voluntad del pueblo de Birmania tal y como se expresó en las elecciones democráticas del 8 de noviembre“.

El embajador de Canadá, Rob Rae, afirmó en Twitter que el ejército birmano “escribió la Constitución de esta manera para poderlo hacer”.

“La Constitución de 2008 fue concebida específicamente para garantizar que el poder militar permanezca profundamente arraigado y protegido“, añadió.

Europa

A una semana del golpe, las máximas autoridades de la Unión Europea (UE) también lo desaprobaron.

“Condeno con firmeza el golpe en Birmania. El gobierno legítimo debe ser restituido, en línea con la Constitución del país y la elecciones de noviembre”, apuntó en un tuit la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.

Por su parte, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, publicó en Twitter un mensaje similar pidiendo a los militares “que liberen a todos los detenidos ilegalmente en operaciones en todo el país”.

El jefe de la diplomacia de la UE, el español Josep Borrell, también condenó el golpe y lamentó la “tentativa de los militares de revertir el deseo de los ciudadanos de Birmania”.

“El presidente Win Myint, la consejera de Estado Aung San Suu Kyi, y todos aquellos que han sido arrestados deben ser liberados de forma inmediata e incondicional”, enfatizó Borrell.

Francia pidió que “se respete el resultado de la votación birmana” y dijo que el gobierno está analizando la situación “con sus socios en el marco de las instancias internacionales”, según el portavoz del gabinete, Gabriel Attal.

El primer ministro británico, Boris Johnson, se refirió al golpe mediante Twitter: “Condeno el golpe de Estado en Birmania y la detención ilegal de civiles, entre ellos Aung San Suu Kyi”, escribió Johnson en Twitter.

En la misma red social y con un mensaje similar, la ministra sueca de Exteriores, Ann Linde, “condenó” el golpe de Estado y pidió al ejército que “respete el Estado de derecho” y los resultados de las elecciones, a su vez exigió la liberación “inmediata e incondicional” de todos los dirigentes civiles.

Desde Dinamarca, el ministro de Asuntos Exteriores, Jeppe Kofod, declaró que el país “condena enérgicamente” el golpe, pidieron “a todas las partes que respeten los resultados de las elecciones democráticas” y solicitaron la liberación de “todos los líderes civiles y funcionarios del gobierno”, añadiendo en un mensaje en Twitter que “el ejército controlado por civiles es un principio democrático clave”.

De igual manera, la ministra noruega de Asuntos Exteriores, Ine Eriksen Søreide, tuiteó: “Condenamos los acontecimientos de hoy en Birmania”.

“Pedimos a la cúpula militar que se atenga a las normas democráticas y respete el resultado de las elecciones. Los políticos elegidos democráticamente deben ser liberados”, sentenció.

Oceanía

La ministra australiana de Relaciones Exteriores, Marise Payne, declaró: “Llamamos al ejército a respetar el Estado de derecho, a resolver los diferendos con mecanismos legales y a liberar inmediatamente a todos los dirigentes de la sociedad civil y otras personas detenidas ilegalmente”.

Asia

Por su parte, China llamó el lunes a todas las partes implicadas en Birmania a “solucionar sus diferendos” en el marco legal y constitucional.

“Esperamos que todas las partes implicadas en Birmania solucionarán sus diferendos en el marco de la Constitución y de las leyes para mantener la estabilidad política y social”, declaró el portavoz de la diplomacia china, Wang Wenbin.

Mientras, el ministerio japonés de Asuntos Exteriores pidió la liberación de Aung San Suu Kyi e instó “al ejército nacional a restaurar rápidamente el sistema político democrático”.

En India, mediante un comunicado, el ministerio de Relaciones Exteriores sostuvo: “Observamos con mucha preocupación los hechos en Birmania. India siempre ha aportado apoyo constante al proceso de transición democrática en Birmania. Pensamos que el Estado de derecho y el proceso democrático deben ser respetados“.

Finalmente, el ministerio de Relaciones Exteriores de Singapur manifestó su “gran preocupación” respecto a la situación en Birmania y dijo esperar que todas las partes “den muestras de moderación”.