Estados Unidos aumentará devoluciones en caliente de migrantes ante el cese de la normativa del Título 42. Una expulsión en caliente impide que un migrante tenga acceso al debido proceso de petición de asilo o acogida.

Estados Unidos se centrará en aumentar los operativos de procesamiento de inmigrantes y las “devoluciones en caliente” durante los próximos días, ante el fin esta semana de la polémica normativa del Título 42 que amenaza con desbordar las fronteras.

Así lo aseguraron altos funcionarios del Gobierno estadounidense en una conversación telefónica con medios en la que volvieron a insistir en que tras el fin de esta medida “la frontera no va a estar abierta”.

Por el contrario, se aseguró que se van a imponer “duras consecuencias” a quienes intenten entrar ilegalmente en Estados Unidos.

Este jueves 10 de mayo cesa el vigor de la normativa migratoria Título 42, una medida que adoptó el expresidente republicano Donald Trump (2017-2021). Después continuó el mandatario demócrata Joe Biden para expulsar a migrantes con el argumento de la pandemia de covid-19.

Para prepararse ante los posibles problemas que genere el fin de esta normativa, por el posible aumento del flujo migratorio, se desplegarán en la frontera 1.500 militares estadounidenses.

Esto, para apoyar “en tareas administrativas” a los agentes de la Patrulla Fronteriza y también se ha aumentado el número de oficiales de asilo, de jueces de inmigración y de abogados.

Autoridades de Estados Unidos amenazan con “repatriación acelerada”

En total se han mandado a la frontera de manera temporal a “más de 4.000 personas” para reforzar las operaciones.

Además, “se han reentrenado todos nuestros oficiales de asilo para que estén listos y dispuestos para las entrevistas que van a ser necesarias para la repatriación acelerada que vamos a empezar a llevar a cabo a partir del jueves”, declararon estas fuentes.

“Vamos a someter a los migrantes que encontremos en la frontera a una repatriación acelerada”, insistieron dichas fuentes, y a los ciudadanos de Cuba, Nicaragua, Venezuela y Haití que no establezcan base legal “van a ser devueltos a México con una orden de repatriación”.

Como parte del objetivo disuasorio, el Gobierno de Joe Biden tiene previsto incrementar los operativos de seguridad para procesar a los migrantes que hayan pasado la frontera de manera irregular.

Durante las próximas horas agentes de la Patrulla Fronteriza tienen previsto realizar una operación especial de detención de migrantes en El Paso, Texas.

Allí llevan días durmiendo centenares de personas, para detectar a quienes no hayan sido procesados y repatriar a quienes no cumplan con los requisitos para solicitar quedarse en el país.