Luego de un derrame de petróleo en la zona de Cuninico, provincia de Loreto, en la Amazonía de Perú, los dirigentes del lugar tomar la determinación de tomar como rehenes a más de 150 ciudadanos extranjeros, para llamar la atención del gobierno y que les entreguen una solución.
Un grupo de al menos 150 turistas, se encuentran secuestrados en Cuninico, una provincia de la Amazonía de Perú, por parte de los lugareños que buscan llamar la atención del gobierno por un derrame de petróleo.
La fuga del combustible se había ocasionado en septiembre pasado, momento en que se secuestró también a cuatro trabajadores de la estatal Petroperú, lo que ya fueron liberados.
Turistas secuestrados en Cuninico, la Amazonía de Perú
Un centenar de turistas de distintas nacionalidades fueron tomados como rehenes en la selva amazónica de Perú, ante lo que califican como una la falta de acción del gobierno tras un derrame de petróleo.
Según información de RPP Radio, el grupo se encuentra un niño de apenas un mes, una mujer embarazada y una persona con discapacidad.
De acuerdo a los dichos de Watson Trujillo, líder de la comunidad de Cuninico, la “medida drástica” fue en respuesta a una fuga de petróleo en septiembre que provocó un derrame de aproximadamente 2.500 toneladas de crudo en el río local.
Al respecto, Ángela Ramírez, parte del grupo de turistas secuestrados en la zona de la Amazonía Peruana, mencionó que los comuneros les indicaron que estarían retenidos entre 6 a 8 días, hasta que no se logre una solución y alguna autoridad viaje hasta la región.
En concreto, dentro de grupo retenido hay personas de distintas nacionalidades, como de Estados Unidos, España, Francia, Reino Unido y Suiza.
El hecho ecológico habría sucedido el pasado 16 de septiembre, cuando la ruptura de una tubería de Petroperú había ocasionado que el petróleo se disperse en la quebrada de Cuninico y, en una estela de contaminación aguas abajo, llegue al río Marañón.
Por lo anterior, los comuneros de Cuninico anunciaron bloqueo del tránsito de embarcaciones por el río Marañón en protesta por el derrame de petróleo ocurrido el 16 de setiembre.
