El intento de asesinato que sufrió la vicepresidenta Cristina Kirchner en la noche de este jueves 1° de septiembre encendió alarmas en torno a su custodia. Quedó de manifiesto que no tuvo la capacidad de impedir lo que pudo ser una tragedia ya que estuvo en riesgo la vida de la vicepresidenta de Argentina.

Luego del atentado contra la vicepresidenta Cristina Kirchner, el senador argentino Oscar Parrilli explicó por qué la expresidenta no reaccionó y siguió firmando autógrafos con normalidad tras el intento de magnicidio, e indicó que no descarta que “haya alguien detrás” del ataque.

“Cristina está bien, obviamente dentro del contexto. Impactada, conmovida y con la entereza que la caracteriza”, explicó Parrilli este viernes 2 de septiembre en diálogo con Roberto Navarro en Navarro 2023 (El Destape Radio).

Pese a que la vicepresidenta tuvo un acto reflejo luego de que el atacante gatillara en la cabeza, Cristina Kirchner continuó firmando libros, lo que alimentó críticas y teorías conspirativas en redes sociales.

Sobre ese punto, Parrilli explicó que “ella en ese momento no percibió la gravedad, ni mucho menos, ni vio porque fue un hecho muy relámpago”.

“Se había caído un libro y ella se agachó a levantar el libro”, aclaró y reiteró: “Ella no percibió fue un segundo”.

Así, lamentó este intento de magnicidio en plena democracia y lo definió como “un hecho que marcó un antes y un después porque en los 40 años de democracia no ocurrió algo de esta gravedad institucional”.

No descartan un ataque coordinado contra Cristina Kirchner

Mientras avanza la investigación judicial sobre el agresor que fue reducido y detenido en el lugar, Parrilli pidió que se logren esclarecer los hechos sobre lo sucedido.

Por esto mismo, enfatizó en que la Justicia “vaya atrás del atacante todo lo que se pueda”. “La sociedad argentina merece saberlo. Si realmente se trata de un hecho aislado e individual, o hay algo más”, exigió.

De esta manera, aseguró: “No descarto nada. Tratándose de ella y todo lo que se ha ido generando, el clima”, por lo que responsabilizó a los medios de comunicación y los dirigentes políticos a quienes acusó de “alentar permanentemente el odio y la violencia”.