A inicios de febrero, el conocido jurado y productor de MasterChef Chile, Chris Carpentier, anunció a través de su cuenta de Instagram que será parte del mismo programa en su versión de celebridades, pero en Colombia.

Recordemos que dos proyectos anteriores del conocido chef fueron grabados en ese país, por lo que generó lazos laborales que le han permitido instalarse allí para engrosar su currículum. Pero además de eso, aprovechó su estadía en el extranjero para someterse a un tratamiento rejuvenecedor.

En conversación con Las Últimas Noticias, Carpentier reveló algunos detalles de esto, pues no estaba conforme con su imagen a los 47 años. «No me gusté. Estaba con kilos de más y aspecto cansado», reconoció.

Por lo mismo, tomó medidas para bajar de peso y recurrió a una inyección que cuesta cerca de 870 mil pesos chilenos.

 

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RC35+

«Esto tiene que con un tema de cuidados. En Chile nos empezamos a preocupar cuando ya estamos mal y yo le tengo pavor a llegar a la vejez inutilizado, sin energía para nada. Quizás viéndome joven por fuera, pero hecho bolsa por dentro. Me cuestioné en qué condiciones quiero llegar a viejo», se sinceró el chef.

Liliana Nieto, directora ejecutiva del centro especializado al que acudió Chris (@bigenics), explicó que el tratamiento se llama RC35+. «Es una fórmula inyectable que ayuda al cuerpo a mejorar todas sus funciones internas. El mejoramiento que tienes es de adentro hacia afuera, a través de esta inyección que tiene muchas vitaminas, aminoácidos, minerales, antioxidantes», dijo.

Al ver lo popular que era entre otros de sus compañeros, Carpentier decidió hacer la prueba. «Los hombres también tenemos crisis o rachas de vanidad a mediana edad. Podemos ser vanidosos«, aseguró.

De hecho, reconoció que rápidamente notó los beneficios de este shot vitamínico, pues pudo mejorar sus horarios de sueño. «Ando con más energía. Grabo 12 horas diarias y, como me gusta lo que hago, quiero andar siempre empilado«, agregó.

 

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Sentirse joven

Según comentó en la entrevista, «esto no se trata de bótox ni inyectarse ácido hialurónico y quedar con la cara como un muñeco de museo de cera, solo es una ayuda para llegar a la adultez de manera digna«.

Para Chris Carpentier, lo fundamental de esto es sentirse vital de manera interna.

De hecho, tanto el cerebro como el cuerpo empiezan a envejecer a partir de cierta edad. Así lo explicó a LUN Andrés Klein, director de genética y genómica de la facultad de medicina de la Universidad del Desarrollo.

«A los 21, el desarrollo del cerebro comienza un declive. Físicamente entre esa edad y los 25 años la musculatura también disminuye: puedes desarrollarla con entrenamiento, pero llegas a una edad donde no funciona tan eficientemente. A los 25 años también comienza un daño oxidativo en la piel», advirtió el especialista.