Sorpresa causó este fin de semana en Chile la aparición de Francisco Saavedra en una transmisión vía Instagram Live del actor estadounidense Jared Leto; la misma que, desafortunadamente para el animador, sólo duró 15 segundos.

“Chile… te veo, Franceso… ¿o Francisco? No sé”, dijo el intérprete mirando la cámara. “Hola, mi nombre es Francisco de Chile”, alcanzó apenas a responder el periodista antes que la imagen se fuera a negro.

¿Qué pasó realmente? Saavedra lo explicó en diálogo con el diario Las Últimas Noticias. “Estaba en mi tiempo de ocio en mi celular y vi que Jared Leto estaba en un en vivo. Le escribí 20 veces Chile con el emoticón de nuestra bandera”, contó.

Tras la insistencia del animador, Leto aceptó la invitación de Saavedra para sumarse al Live, el que terminó abrúptamente tras un inesperado error del chileno.

“Cuando me conecté quise acomodar el celular en el escritorio y ahí se me cortó la comunicación”, reveló.

“Igual tengo algunas ideas de lo que puedo haber pasado: Jared puede haber cortado la comunicación, pero no creo, porque fue súper amable. O fue mi señal, tenía una rayita del 4G”, añadió.

Sobre su primera impresión tras ver al estdounidense, el conductor aseguro: “Quedé como paralizado cuando lo vi, cuando aceptó mi solicitud para conectar. Me puse rojo. Después, cuando se cortó, quedé como frustrado. Tenía ganas de conversar con él. Lo que me pasó te puede pasar una vez en la vida”.

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Esta foto me fascina @falklands_gov #LugaresQueHablan

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REFLEXIÓN EN CUARENTENA : Soy un privilegiado. En mis viajes por trabajo he podido conocer un Chile que muchos no ven. Un Chile invisible. Un Chile en el que día a día se responde a la pregunta que muchos ya tienen contestada: "¿qué vamos a comer y cómo?". No hablo de un menú. De las cazuelas con que se bromea a veces. Hablo de un pedazo de pan. De lo más humilde. De lo que todos nosotros, los que somos privilegiados por tener abrigo, un trabajo y gente que nos puede tener una mano, a veces damos por descontado. Hoy, cuando mi país sufre. Cuando el mundo sufre con la pandemia del Covid-19, mis pensamientos están con ese Chile. El invisible. El de la persona cuyo trabajo es hacer que otros atraviesen un puente para llegar a su hogar y ganarse unos pesos. El Chile de las mujeres que llevan décadas dando la cara. El de los trabajadores y trabajadoras más humildes. El país que a veces los medios de comunicación ignoran. El que he podido recorrer, sabiendo que un día llegaría el día de hacerlos visibles ante los ojos de todos. Por eso, ahora que Chile y el mundo sufren, mis pensamientos están con ellos. Mi corazón los acompaña y los ayuda, de todas las maneras posibles, a estar presentes en la mente de los que tenemos la suerte de estar a resguardo. Quiero que pensemos en ellos siempre, no sólo ahora que hay una emergencia. Quiero que ojalá algún día podamos desarrollar con fuerza un cariño innato por las personas que menos tienen, los que más sufren y quienes son menos tomados en cuenta por el sistema, sea quien sea que lo maneje. Creo que esta crisis nos ha dado mucho sufrimiento. Y sé que cuesta dejar de pensar en ello. Por eso les pido a todos, que me ayuden y se ayuden a ustedes mismos a aprender algo muy simple, pero que ignoramos por demasiado tiempo: ser empático. Vivir en los zapatos del otro. Los zapatos embarrados. Los que trabajan todo el día. Los que no ven la hora de descansar. Los que merecen hoy que seamos conscientes de su realidad.

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