A más de 10 años desde el final del recordado reality, el exparticipante conocido como "El Conde" reveló que hace seis meses comenzó su transición de género y que decidió regresar a Chile desde Eslovenia debido a la discriminación.

Como “El Conde” era conocido Branislav Tepes, ahora Brany, cuando llegó al reality de Canal 13, Mundos Opuestos. Fue en el 2012 que el participante se talló en la memoria de los televidentes luego de declarar que su padre era descendiente de Vlad Tepes, también conocido como Drácula.

De ello ya ha transcurrido más de una década, por lo que poco se ha sabido de ella desde entonces. A excepción de ahora, que concedió una entrevista a Página 7, a quienes contó que lleva seis meses en transición de género.

“Tenía miedo, no se lo quería decir a nadie, ni siquiera a mi familia”, confesó Brany. Todo esto, pues desde pequeña sufrió discriminación: “Siempre fui un niño que jugaba más con las niñas, que no le gustaba el fútbol, que era más fino. Pasó el tiempo y me empezaron a discriminar con que era gay, una discriminación brutal, que viví durante toda la infancia y la enseñanza media”.

Sobre el momento en que se comenzó a identificar como transgénero, Brany reveló que sucedió cuando fue a una cita con una chica, quien le confesó ser trans. Posterior a ello, se alejó de ella, pero terminó relacionándose con más personas de la comunidad que le permitieron normalizarlo.

“Fui asimilando todo, de que no era algo malo, prohibido. Incluso empecé a sentir un cierto grado de envidia sana, porque ellas eran capaces de enfrentar al mundo, a la sociedad y ser como querían ser y que nadie les dijera nada”, admitió.

Sin embargo, aseguró que siempre fue difícil para él comenzar su propia transición: “Si yo daba ese paso, podía matar a mi mamá de un infarto y me iban a discriminar diez veces más”, aseguró.

Debido a la discriminación que vivía en Eslovenia por su condición, Brany no acostumbraba a vestirse o maquillarse como mujer, para evadir momentos incómodos o hechos de violencia en el mencionado país.

“Llegué a Chile hace 12 días. Allá en Eslovenia no me pinté, no hice lo mismo que acá, porque allá hay mucha discriminación, homofobia. El segundo partido político dominante está en contra de las personas trans, del movimiento LGBTIQ+. Eslovenia es un país bastante discriminador con ese tema”, detalló.

Por lo mismo, afirmó que “en Eslovenia tengo miedo de vivir con mi nueva condición, porque hay muchas miradas feas. La cultura eslava es muy machista y cerrada”, contó.

Actualmente, Brany Tepes se trasladó a Chile y a través de sus redes sociales muestra parte de su proceso de transición que comenzó en Eslovenia.

Para leer la entrevista completa entra a Página 7.