El comunicador aseveró que desde el canal "me hicieron sentir un depravado". ""¿Por qué no me llamaron el día del beso? Esto pasó porque apareció en el diario", criticó.

A tres semanas de haber protagonizado una de las polémicas televisivas en la cobertura del Festival de Viña del Mar, Arturo Walden, mejor conocido como “El Kiwi”, comentó su abrupta salida de TVN tras haber “robado” un beso a la comediante Pamela Leiva, asegurando que “no era para tanto”.

En conversación con La Hora, el comunicador relato su experiencia como notero de TVN, recordando también cómo se vivió aquel momento con Leiva que lo llevó a dejar el matinal Buenos Días a Todos dos días después.

“No era para tanto, han pasado las semanas y sigo pensando lo mismo”, apuntó de entrada, asegurando “me equivoqué, pero me hicieron sentir un depravado”.

Nunca pensé que esto terminaría así, he llorado harto, pero bueno, no queda otra que dar vuelta la página”, comentó en conversación con Sergio Marabolí.

El relato del “Kiwi” sobre el beso con Pamela Leiva

De acuerdo a Walden, él estaría a cargo de realizar un móvil con Leiva para hablar el triunfo en la Quinta Vergara. Entonces, “un productor en la mañana me dice ‘no está en un hotel, está en un departamento en Concon Alto"”, por lo que se dirigió al lugar.

Entonces, aseguró que no tuvo respuesta de los productores sobre cómo realizarían el primer móvil del matinal, por lo que decidió contactarla con su número personal, a lo que ella aceptó a salir para realizar la entrevista.

De acuerdo a Walden, él no había visto el beso entre Leiva y Gonzalo Valenzuela en el festival y, al escuchar lo que decían en el matinal, quiso bromear al respecto.

“Entonces le dije ‘dame un beso a mí’ y me puse así, con mi cabeza hacia la cámara, y creo que le rocé la nariz. Ni siquiera le di un beso y me devolví”, narró.

Tras ello, Walden recuerda que “la Pamela me dice esa frase, que encuentro que es tan dura, de que ahora no se roban los besos. Pedí perdón, nos cagamos de la risa (sic), y seguimos”.

Sin embargo, al día siguiente, dio cuenta de los comentarios en redes sociales. Le preguntó a un productor sobre qué hacer al respecto y, al no tener respuesta, quiso hablar con un medio nacional sobre su versión de los hechos.

El “Kiwi” y su salida de TVN

Ese mismo día, el comunicador aseguró que le aconsejaron no ir a la Quinta Vergara con el fin de “protegerlo”. Al día siguiente, Walden continuó con su rutina, sin embargo, sus superiores le dijeron que no haría contactos y que hablarían durante el mediodía.

“A la una de la tarde, golpean a la puerta de mi pieza. Una productora que estaba a cargo de nosotros en Viña menciona que quieren hablar conmigo”, explicó, asegurando que jamás le mencionaron con quién y de qué hablarían.

“Me llevaron a una pieza, con dos camas y una mesa al medio. Faltaba solo una luz al medio y listo (…) me iban a pagar hasta ese día, y yo les dije ‘no pueden ser tan rascas’ (sic), de verdad no lo podía creer”, recordó.

“Solo faltó que me mandaran en bus para Santiago. Me sentí humillado, me cortaron las manos”, criticó.

“¿Por qué no me llamaron el día del beso? Esto pasó porque apareció en el diario. Si (los medios) no hubieran dicho nada, ningún problema”, aseveró.

Pese a su amarga salida de TVN, el “Kiwi” aseguró que decidió salir adelante, por lo que actualmente se encuentra preparando su propio show de stand-up que llamará “La culpa fue del primer beso”.