En medio de la polémica de la serie "Griselda" de Netflix, Michael Corleone Sepúlveda Blanco criticó la representación de su madre por Sofía Vergara. Sostiene que la producción la presenta de manera "fea" y acusa falta de colaboración familiar. Incluso asegura que, de estar viva su madre, la situación sería diferente.

En medio de la controversia que rodea la miniserie “Griselda” de Netflix, Michael Corleone, hijo de la famosa narcotraficante Griselda Blanco, criticó la caracterización que hace la actriz Sofía Vergara de su madre en la producción.

En declaraciones anteriores, Corleone había manifestado su insatisfacción por la falta de comunicación entre la producción, encabezada por Sofía Vergara, y su familia. Además, indicó que se encuentra redactando un libro que detallaría algunos eventos clave en la vida de su madre, sugiriendo que ciertos datos de su obra fueron utilizados en la miniserie.

Pero esta vez, el hijo de Griselda Blanco criticó la caracterización física de su madre en la serie de Netflix. Corleone sostiene que la producción la retrata como una mujer “fea”, contradiciendo su percepción de que su madre era una mujer elegante y atractiva.

En una entrevista con el diario británico Daily Mail, Michael defendió la belleza de su madre, citando que en su juventud la llamaban “la muñeca de porcelana”, según revelará en su libro.

“Mi madre era una mujer preciosa y es una locura que mucha gente diga ‘No, tienes que parecer más una drogadicta’… El hecho de que la llamen ‘fea’ me ofende mucho”, expresó el ahora empresario.

“La gente ve sus fotos de la ficha policial y se basa en eso”, agregó. “Pero cuando lean mi libro, verán que a mi madre la llamaban la muñeca de porcelana en su juventud”.

Así, aseguró que “alcaldes, gobernadores y políticos de distintos países intentaban cortejar a mi madre… incluso aquí, en Estados Unidos. Era la crème de la crème”.

“No era una santa pero te voy a decir una cosa… mi madre era una estrella y una reina”, sostuvo.

Afirmó que la serie se gestó con fines comerciales, omitiendo la colaboración esencial de la familia y sugiriendo que, de estar viva su madre, la situación habría sido diferente.

“Nos invitaron para sentarnos con ellos y decirnos que no había sitio en el proyecto. El equipo de Sofía y los creadores de Netflix fueron irrespetuosos y, en última instancia, produjeron el proyecto Griselda por su cuenta para obtener beneficios comerciales, sin detalles clave de la familia Blanco”, relató. “Todo lo que tengo que decir es que si mi madre estuviera viva, no se habría salido con la suya”.