Irina Shayk, la belleza rusa que ha conquistado a algunos de los hombres más codiciados del mundo, es la protagonista de una de las noticias más sorprendentes del espectáculo internacional de las últimas semanas.

Junto a Kanye West se han transformado en la pareja del momento, luego de que se revelara el romance con el que el rapero comenzaría a dejar atrás a su exesposa, Kim Kardashian.

Pero, ¿quién es esta escultural modelo, que protagoniza las campañas publicitarias más importantes del mundo y camina por las pasarelas más prestigiosas?

Puede que jamás haya pasado desapercibida, sin embargo, detrás de esa mirada fría, se esconde una historia de bullying en una dura infancia, cuando nunca imaginó llegar a tener el éxito que tiene hoy.

Irina, de Rusia al mundo

¿Quién es Irina Shayk? Para contar su historia hay que partir por que su nombre no es ese, sino que se llama Irina Valérievna Shaijlislámova, un par de apellidos casi impronunciables, que cambió al Shayk que le abrió las puertas del mundo de la moda, con mayor facilidad.

Nació en una pequeña localidad rusa llamada Urales de Yemanzhelinsk, un lugar que ella ha mencionado como un pueblo en medio de la nada, con 30 mil habitantes, destacó La Vanguardia.

En este remoto lugar, existía una mina de carbón que era el sustento de la mayoría de los habitantes de la zona, donde también trabajó el padre de la modelo, quien falleció a causa de una neumonía, cuando Irina tenía sólo 14 años.

De su padre, Valery Shaykhlislamov, de origen tártaro, sacó la tez bronceada que muy niña le generó inseguridad, es por esto que declaraba a Hola!: “Nací y crecí en un pueblo pequeño, y ni siquiera pensaba que fuese especialmente guapa. A los 14 años, habría dado todo por ser un chico: estaba convencida de que era horrible y de que nadie me encontraría nunca atractiva”.

Su madre, Olga Shaykhlislamova, una profesora de música en una guardería, hizo todo por sus hijas, Tatiana e Irina, a quienes tuvo que sacar adelante cuando todo venía cuesta abajo para ellas.

La modelo señalaba que tras terminar el colegio ayudaba a su madre con los quehaceres del hogar. “Al terminar la escuela, mi hermana y yo ayudábamos a mi madre en el jardín. Sembrábamos papas, pepinos y tomates, no por diversión sino para comer. Éramos muy pobres”, indicó, añadiendo que su infancia fue muy diferente de su presente con aviones privados y exclusivas amistades.

Además, contó que en su niñez vivió en carne propia el bullying, porque sus compañeros de colegio se rieron constantemente de ella debido a su característica piel morena, algo que también continuó mientras trabajaba como modelo.

Declaró a El País que en más de una ocasión sus compañeras se burlaron de ella por lo mismo y también su delgadez, destacando que “para empezar, no es fácil meterse con una rusa. No era que me hicieran bullying, se trataba más bien de bromas sobre mi aspecto porque era muy delgada. Me llamaban ‘palillo andante’. Este no es ese negocio glamoroso que la gente imagina. Tienes que tener una personalidad fuerte para llegar a donde quieres”.

Irina Shayk, las penurias previas a la fama

Su padre falleció cuando tenía 14 años, por lo que su adolescencia no fue una gran experiencia, entre que apoyaba a su madre con las cosas de la casa, y tratando de traer recursos a casa.

Comenzó a estudiar marketing, aunque ha reconocido que no le gustaba ya que le parecía aburrida, sin embargo tenía que trabajar y decidió ser una pintora de brocha gruesa, trabajando en un hospital con el objetivo de conseguir dinero para poder comprar algunas cosas.

No obstante, un paradero de buses cambiaría la vida de la modelo, para siempre.

Su madre, vio el aviso de una agencia de modelos que estaba reclutando jóvenes para que pudieran trabajar en el mundo de la moda, en ese aviso ella vio una oportunidad.

Según destacó La Vanguardia, Olga vio una oportunidad en el modelaje, pero para la mayor de sus hijas, Tatiana, sin embargo, Irina la acompañó al casting y llamó la atención de los organizadores, momento en el que comenzó su carrera en la moda.

En ese momento, 2004, la joven participó en el concurso Miss Cheliábinks y obtuvo la corona, por lo que levantó su carrera mudándose a Paris, la capital de la moda, aunque no hablaba francés o inglés y apenas contaba con dinero para sobrevivir.

Respecto de esos momentos, señalaba: “Nunca había viajado en avión hasta los 19 años. Cuando llegué a París por primera vez tenía 20 años, y nada que ponerme ni que comer. Recuerdo que me sentía muy avergonzada delante de otras modelos por cómo iba vestida”.

Las penurias las vivió, su menú diario se limitaba a un plato de arroz mientras buscaba su gran oportunidad en la ciudad de la Torre Eiffel, la que llegó cuando firmó con la prestigiosa agencia Elite Barcelona.

El trabajo y la fama llegó

La modelo comenzó a trabajar para Elite, la agencia que le consiguió diversas portadas y trabajos con prestigiosas firmas de moda, hasta que consiguió uno de sus mayores logros: ser la portada de la revista Sport Illustrated en 2011, convirtiéndose en la primera mujer rusa en obtener este reconocimiento en su carrera.

Aunque la fama mundial llegó cuando se convirtió en la pareja del futbolista del Real Madrid, Cristiano Ronaldo, al mismo tiempo que era la protagonista de un anuncio de Armani.

El portugués, que hizo sufrir a Coca-Cola esta semana, mantuvo una relación de casi cinco años con la modelo y aunque vivieron muchos momentos importantes juntos, no habrían terminado de la mejor forma, considerando que Irina señaló: “Me sentí fea e insegura” (en la relación).

Shayk declaraba a Hello!: “Quiero un hombre fiel, honesto, un caballero que sepa cómo respetar a las mujeres. No creo en los hombres que nos hacen caer y sentirnos infelices, porque eso no es de hombres sino de niños”, añadiendo que pensó “que había encontrado ese hombre ideal… pero no”.

La modelo finalizó con: “Si tienes una relación, debe ser buena; de lo contrario es mejor dejarla. Las relaciones son duras, así que has de tener claro qué clase de hombre quieres a tu lado y cuáles son tus valores, qué es importante en tu vida. Si permaneces junto a alguien es porque caminas en la misma dirección y los dos buscan lo mismo. Ambos deben compartir el mismo concepto de lo que significa una relación y la misma energía para creer en una relación monógama”, sumando a su declaración: “Quiero un hombre fiel, honesto, un caballero que sepa cómo respetar a las mujeres”, destacó La Vanguardia.

Aunque su relación no funcionó, si la puso en el radar de la moda y la elevaron a la categoría de modelo top, protagonizando portadas para Elle, Harper’s Bazaar, Cosmopolitan, Tatler, Marie Claire, Vanity Fair o Vogue y trabajando con prestigiosas marcas como Armani, Versache, La Perla, Triumph, La Perla, Ory o Victoria’s Secret.

La moda o el espectáculo

Elevó su categoría también a una mujer del espectáculo, cuando comenzó una relación con el actor Bradley Cooper, desde 2015 con quien dio un paso más, ya que ambos tuvieron una hija, Lea de Seine.

A partir de ese momento se le comenzó a ver junto al actor en diversos eventos y alfombras rojas, siendo el más significativo la aparición que realizaron en los premios Oscar 2019, cuando causaron controversia al estar junto a Lady Gaga.

Recordemos que Lady Gaga protagonizó junto a Cooper la película “A star is born”, cantando juntos la canción principal por la que la artista ganó el Oscar. En ese momento hubo rumores de una posible relación entre la cantante y el actor, lo que se reafirmó cuando Gaga ganó el Oscar y no saludó a Irina que estaba a su lado.

Aunque los rumores pronto fueron descartados por la pareja, su romance sólo llegó hasta junio de 2019 cuando se separaron oficialmente, aunque son frecuentemente vistos juntos, considerando que comparten la crianza de su hija.

Respecto de su relación con Bradley, la modelo lo destacó como “el padre más increíble” asegurando que ambos mantienen una buena relación en post de su hija. Además señaló respecto de compartir la crianza con el actor. “Nunca he entendido el término copaternidad”, señaló, indicando que “Cuando estoy con mi hija, soy 100% madre, y cuando está con su padre, él es 100% su padre. La copaternidad es la paternidad”.

Lea no ve a Shayk como una supermodelo, “solo como mamá”, contó en declaraciones consignadas por Vanitatis.

¿Kanye West e Irina Shayk?

La modelo a menudo es noticia por los atuendos que luce mientras pasea con su hija y sus amigas en Nueva York, tal como destacaba Vogue hace unos días indicando lo bien que podía combinar el pantalón ‘op-art’ con un body ‘cut out’.

Aunque últimamente ha sido protagonista de la prensa rosa por otra razón: su relación con el rapero Kanye West, el ex marido de Kim Kardashian.

Según revelaba Vanity Fair, la modelo y el cantante se han estado viendo durante un par de meses, algo de lo que la más popular de las Kardashian estaba al tanto.

La revista aseguraba que “Kanye e Irina están en una fase de luna de miel amorosa en este momento”, añadiendo que “se están conociendo y divirtiéndose mucho. No es nada serio todavía, pero se quieren mucho”.

El pareja se habría conocido hace muchos años, cuando él la vio en la filmación de uno de sus videoclips en 2010 y pensó que era hermosa, a lo que la fuente destacaba: “Él siempre pensó que ella era especial y ella tenía un lugar en su mente”.

People destacó que otra fuente reveló que la pareja se mantendrá a distancia, indicando que el rapero está centrado en sus negocios, así como sus hijos, que comparte con Kim.

También asesugaron que el cantante “empezó a perseguirla hace unas semanas. Kanye es un tipo persuasivo. Salió con ella en Nueva York antes de que celebraran su cumpleaños en Francia”. Respecto de la modelo, la revista afirmaron que “parece enamorada”, revelando que “la invitó a Francia y ella aceptó felizmente. No están saliendo oficialmente, pero hay interés de ambas partes”.

Aún hay mucho por saber de esta pareja que causó sensación durante las últimas semanas, copando los portales por un romance que parece próspero y con el que sus ex parejas, Bradley y Kim estarían de acuerdo, por lo que es de esperar que continúe.