Katy Perry pasa por uno de los mejores momentos de su vida. Está comprometida con el actor Orlando Bloom y juntos esperan su primer hijo, sin embargo, tuvo que atravesar un largo camino para llegar allí.

En una entrevista con el programa de radio canadiense Q on CBC, la cantante reveló que tras su quiebre con Bloom en 2017 y la baja venta de uno de sus discos, sufrió un colapso que la llevó a pensar en quitarse la vida.

Según Perry, en ese momento sintió que había tocado fondo en su vida personal y laboral y que estaba “revolcándose” en su “propia tristeza”. “Perdí mi sonrisa… No sé si mi sonrisa fue siempre completamente auténtica, pero estuve en la cima con una sonrisa durante mucho tiempo. Tuve la validación, el amor y la admiración del mundo exterior, y luego eso cambió”, dijo.

“Me separé de mi novio, que ahora es el futuro padre de mi bebé, y luego estaba emocionada por volar alto con el próximo disco, pero eso no me elevó tanto. La validación no me levantó, así que me caí”, aseguró la interpreté que reconoció que eso “literalmente, me partió por la mitad”.

“Fue muy importante quebrarme para poder encontrar mi integridad de una manera completamente diferente. Y encontrar otra dimensión, que simplemente vivir mi vida como una estrella pop sedienta todo el tiempo”, dijo la artista de 35 años.

“La gratitud es probablemente lo que me salvó la vida, porque si no hubiera descubierto eso me hubiera revolcado en mi propia tristeza y probablemente hubiera saltado, pero encontré la manera de estar agradecida”, afirmó.

En una entrevista con Vogue India, concedida en enero de este año, aseguró el 2017 y 2018 fue un periodo realmente duro para ella. “Me deprimí y no quería levantarme de la cama… En el pasado, pude superarlo, pero esta vez sucedió algo que me hizo caer por muchos escalones de escalera. Realmente tuve que emprender un viaje de salud mental”, reconoció.

“He hecho mucho trabajo mental, espiritual y emocional en los últimos años… La mayor mentira que nos han contado como artistas es que debemos sentir dolor para crear. No quiero tener dolor emocional toda mi vida para escribir canciones”, aseguró.

Esta no es la primera vez que Perry habla de pensamientos suicidas. En una entrevista de 2014 con el programa australiano The Project, también se refirió al tema, al que incluso hace referencia en su canción “By the Grace of God”, que trata sobre su divorcio en 2011 de Russell Brand.

“A veces puedes ser cegado por tus emociones extremas… Definitivamente estaba buscando respuestas durante el tiempo que escribí esa canción. Y sí, estaba deprimida, y fue triste, y hubo pensamientos, pero nunca hubo acciones, afortunadamente”, aseguró.

“Esa canción es evidente de lo difícil que realmente fue en cierto momento”, continuó. “Me pregunté: ‘¿Quiero soportar? ¿Debería seguir viviendo?"”, comentó.