Sumado al daño físico que puede significar un accidente, también están presentes los efectos colaterales sobre la marca y su negocio. Para ello, es necesario implementar algunas herramientas para reducir los riesgos y prevenir daños en el grupo de vehículos que está a disposición de una compañía.
La industria del transporte experimenta una crisis de seguridad dado el marcado aumento de accidentes en todos sus ámbitos.
Según Comisión Nacional de Seguridad de Tránsito (Conaset), un alto porcentaje de conductores chilenos se distrae con dispositivos móviles al volante, contribuyendo significativamente a esta problemática. Además, la ausencia de control de velocidad en flotas de transporte, turismo o reparto resulta en que un 20% de los vehículos incurran en infracciones graves.
Este escenario subraya la necesidad urgente de implementar sistemas de control y supervisión de velocidad, así como de mejorar la planificación y capacitación del personal para fortalecer la seguridad vial y la responsabilidad en el sector.
Consecuencias graves de los accidentes en las flotas de transporte
En esta misma línea, hay una serie de consecuencias graves que dejan los accidentes en una flota de transporte. De acuerdo con la consultora informática SmartReport, algunos de los efectos negativos son las siguientes:
1. Disminución de la productividad de los involucrados
Los efectos traumáticos de ser parte de un accidente vehicular van más allá de curar las heridas y consecuencias físicas. La disminución de la productividad de un equipo involucrado en un accidente de tu flota de vehículos la causarán aspectos psicológicos y traumas que a veces nunca se dejarán atrás.
2. Daño a la imagen de tu marca
Una foto en el peor momento, un tuit de reclamo o un “cazanoticias con su celular”, pueden ocasionar un daño tal a un negocio que podría acabar cerrándolo. Todo dependerá del azar y el ánimo de las redes sociales en el momento en que se provoque el accidente o tenga el mal comportamiento.
3. Precio de reventa de tu unidad al piso
Si se pretendía tener un cierre de negocio exitoso al vender las unidades en el mercado de usados, tal vez no sería una buena alternativa. Según SmartReport, ahora se tendrán que rematar al mejor postor, pues el seguro pondrá sobre la mesa la información relevante sobre la pérdida total.
4. El seguro te cobrará más
Ahora que la empresa de seguro sabe de tu accidentabilidad, va a subir la prima por unidad notablemente. ¿Qué no te importa y te vas a cambiar de asegurador? Debes saber que las empresas de seguros comparten bases de datos, y cuando descubren que una empresa no controla bien sus procesos y tienen una alta posibilidad de siniestros.
5. El equipo involucrado tendrá mucho que hacer
Declaraciones, juicios, visitas al médico, visitas a abogados (qué tú pagarás), entrevistas en la prensa (que dañan la marca), etc. Si tu equipo o parte de él, que estuvo involucrado en el accidente resultó con vida, tendrá mucho que hacer.
6. Clientes y oportunidades perdidas
Ninguna empresa quiere estar involucrada con proveedores que salen en las noticias porque sus unidades ocasionaron graves accidentes. Es probable que si eso pasa se perderá más de un cliente y, por tener menos unidades productivas disponibles, la capacidad de crecimiento y atender a los usuarios que se quedaron con la marca, será menor, lo que generará descontento y menos clientes en la misma fórmula.
¿Cómo evitar accidentes graves con las flotas de vehículos?
Cuando los choferes se desplazan a altas velocidades en la ruta, están aumentando exponencialmente los riesgos y costos de tu negocio a cargo de tus bolsillos.
Sin embargo, al implementar correctamente un control de velocidad para flotas, se podrá disminuir los gastos en mantenciones, deducibles, reparaciones, multas y el impacto negativo que tiene en tu branding un mal comportamiento de los choferes.
Por otra parte, si se tiene implementado un adecuado sistema de Control y Monitoreo de flotas, se puede comenzar a ahorrar en multas y costos asociados al mal uso de tus unidades.
Con esto no solo disminuirán los costos de la operación, sino también detectar a malos elementos de la flota, los que circulan a excesos de velocidad. Detectar este tipo de elementos será un acto preventivo que a corto plazo repercutirá en las tasas de accidentabilidad y un menor deterioro de las unidades.
