Según detalló el Instituto Nacional de Estadísticas. el comercio y construcción lideraron este segmento que, según el Gobierno, se explica en parte por el alza de emprendimientos.

El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) reportó que la informalidad laboral aumentó a 28,3% en 2021, sumando casi 300 mil personas en esta categoría.

Los datos generales dicen que casi un 80% de los empleos perdidos en pandemia se han recuperado, pero hay una preocupación respecto de qué tipo de puestos de trabajo son los que se han recuperado.

Hoy el INE entregó nuevos datos que dan cuenta que la informalidad siguió aumentando en el mercado laboral durante 2021, con una tasa de 28,3% que equivale a 2,4 millones de personas en este segmento.

Esto quiere decir que se sumaron 288 mil personas en esta condición, pese a que la tasa sigue estando lejos del 29% que hubo en 2019.

Entre los expertos recalcan que este fenómeno es normal, que el aumento de la informalidad ocurre cuando existen crisis sociales, y es también el empleo que se recupera con mayor fuerza.

Sin embargo, Rodrigo Montero de la Universidad Autónoma recalca que hay que enfrentar con prontitud este fenómeno.

Esto, sin embargo, tiene matices.

Reporte de informalidad laboral en Chile

Hoy también se conoció el Informe de Percepciones de Negocios del Banco Central, donde en materia de empleo sectores como agricultura, construcción y turismo dan cuenta que aún tienen dificultades para completar sus vacantes.

Esto pese a que, en casi un 55% de los casos han ofrecido mayores sueldos.

Un fenómeno que, según explicó el ministro subrogante de Economía, Julio Pertuzé puede tener relación con el emprendimiento.

Esto también respondió a fenómenos coyunturales, porque comercio y construcción son sectores donde el empleo por cuenta propia surgió con fuerza a propósito de las inyecciones de liquidez.

Así lo explica Esteban Carrasco, director de Ingeniería Comercial en la Universidad San Sebastián.

En todo este contexto, el informe revelado por el Banco Central también da cuenta que existe un grado importante de incertidumbre en el sector privado.

Si bien han mejorado las expectativas, en el mediano plazo la mayoría de los proyectos siguen paralizados a la espera de definiciones políticas y legislativas.