Previo a la bancarización, tanto personas adineradas como de medianos recursos guardaban su dinero y elementos de valor en cajas fuertes, las cuales sólo era posible abrir con una clave secreta.

Con el paso de los años ese elemento de material pesado y difícil de transportar (y robar) comenzó a usarse cada vez menos y sólo unos pocos mantuvieron la “tradición” de resguardar sus bienes en él.

Sin embargo, durante las últimas semanas las personas más ricas del mundo “dispararon” las ventas de cajas fuerte, como en los viejos tiempos.

¿La razón? Según Bloomberg se debe al temor de una recesión global y los millonarios, además, estarían evitando los grandes depósitos debido a que los bancos están cobrando cada vez intereses más altos por resguardar ese dinero.

Sean Hoey, director de IBV London, una empresa de cajas de seguridad en Inglaterra, comentó que en las últimas semanas se incrementaron las llamadas de adinerados cotizando sus productos.

Ese panorama también se ha replicado en Estados Unidos y Suiza.

La empresa Swiss Gold Safe, según consignó El Diario de Finanzas, también se encuentra sacando cuentas alegres debido al aumento de de cotizaciones y ventas de bóvedas y cajas de seguridad.

“Las personas con mayor poder adquisitivo están optando por las cajas fuertes ya que prevén circunstancias económicas difíciles y quieren tener a salvo su dinero”, explicaron desde esa firma.

Por último, una encuesta aplicada por UBS Global Wealth Management remarcó que los más ricos estarían acumulando efectivo con anticipación por la recesión que prevén de aquí a fines de 2020.