Los gigantes tecnológicos Google e Intel, ambos con sede en Estados Unidos, se han sumado a la lista de bajas del Mobile World Congress (MWC) de Barcelona (España) de este año, debido a la pandemia de coronavirus.

Las dos compañías siguen así los pasos de otras importantes empresas que han decidido no participar presencialmente en el MWC 2021 para proteger la salud de sus trabajadores frente a la covid-19, como es el caso de Ericsson, Nokia, Cisco, Facebook, Microsoft, Sony o BT.

El fabricante de semiconductores y chips Intel informó este jueves que no asistirá este año al MWC de Barcelona debido a que la pandemia de coronavirus sigue siendo un riesgo, por lo que limitará su presencia “solo al ámbito digital”.

“Echaremos de menos a nuestros socios y clientes en persona este año, pero estamos deseando sumarnos a ellos y a GSMA en modo online y en futuros eventos donde podamos participar en persona”, aseguró Intel en un comunicado remitido a una web especializada.

Por su parte, un portavoz de Google ha señalado a EFE que siguiendo las “actuales restricciones y protocolos por la covid-19”, la empresa de internet “ha tomado la decisión de no exhibir en el Mobile Worls Congress este año”.

“Continuaremos colaborando de forma cercana con la GSMA (la entidad organizadora del evento) y apoyaremos a nuestros socios mediante oportunidades virtuales. Estamos ansiosos por las actividades de este año y por vernos en Barcelona en 2022”, ha añadido.

Tras cancelarse por completo la edición del año pasado, está previsto que el MWC, la mayor feria tecnológica del mundo, se celebre de forma presencial este año del 28 de junio al 1 de julio.

El goteo de cancelaciones comenzó al día siguiente de que la patronal GSMA, organizadora del evento, presentara el protocolo para participar en la feria, que por el momento, y a pesar de las bajas, se mantiene sin cambio alguno.

GSMA prevé que este año acudan al Mobile entre 45.000 y 50.000 asistentes, aproximadamente la mitad que en 2019, la última edición que se celebró, y para garantizar la seguridad de todos los visitantes pedirá test negativos cada 72 horas a todo aquel que acceda al evento.

Los asistentes también deberán llevar mascarilla FFP2 y seguir otros protocolos de seguridad, como distancia, higiene constante de manos o tomas de temperatura.