Hasta este miércoles, 181 personas han muerto debido al nuevo coronavirus en Alemania, país que acumula casi 36 mil casos diagnosticados.

No obstante, el panorama anterior dista diametralmente del caos sanitario que el patógeno ha generado en el resto de Europa.

A esta jornada, Italia registra 7.503 decesos, con 74.386 contagios; y España acumula por su parte 3.434 muertos, con 47.610 enfermos.

Tras estas dos naciones se ubica China, con 3.281 pérdidas humanas y 81.218 casos, de acuerdo a un balance compartido por la Agencia France-Presse (AFP).

En esa línea, llama la atención la situación que se vive en tierras teutonas, donde el gobierno no ha decretado medidas estrictas para contener el brote.

De acuerdo a un reporte del diario británico The Independent, el país de Angela Merkel todavía respira más aliviado ante esta pandemia por una serie de factores.

Edad

En primer lugar, uno de los puntos a su favor radica en la edad promedio de los infectados: 47 años, de acuerdo a datos del Instituto Robert Koch, una entidad de investigación y la principal agencia del gobierno federal alemán a cargo del control y prevención de enfermedades.

Dentro de lo que se sabe del nuevo virus, las personas de edad avanzada, con sistemas inmunológico deprimidos y/o que sufran o hayan tenido cáncer son los más desfavorecidos ante un eventual contagio.

Es así como Alemania baraja que los brotes más grandes afectaron a personas de menor edad que asistieron a festivales o que fueron en viajes de ski a Italia o Austria, país donde los adultos mayores tienden a no vivir con miembros más jóvenes de su familia, como ocurre en el sur de Europa.

Salud de hierro

El segundo factor que los ha ayudado a estar más alerta es la preparación de su sistema de salud, tal vez el más robusto y mejor financiado de todo el viejo continente.

“Hemos estado en alerta desde enero, cuando los primeros casos fueron detectados y hemos tenido tiempo para prepararnos”, dijo al citado medio Marilyn Addo, jefa del departamento de enfermedades infecciosas del Centro Médico Universitario Hamburg-Eppendorf.

Además, la experta señaló que Alemania pudo aprender de otros países y comenzó a surtirse de tests y respiradores. Tal ha sido la preparación que incluso han recibido pacientes críticos provenientes de Italia.

Exámenes

El tercer factor que ayudó a los germanos a la hora de mantener a raya la pandemia y aplanar su curva fue el alto número de exámenes realizados desde un principio.

Según datos compartidos con el periódico inglés desde lo que en Chile conocemos como el Colegio Médico, en las últimas semanas se han llevado a cabo 200 mil tests por coronavirus.

“El Instituto recomendó testear masivamente desde muy temprano para detectar casos lo antes posible y así ralentizar el brote”, dijo a la publicación Marieke Degen, una de las voceras del Robert Koch.

“Esto es probablemente por qué comenzamos a ver casos tan temprano, además de otros no tan graves, los que en otras circunstancias habrían pasado desapercibidos”, añadió la portavoz.

Preocupación

De todas maneras, la preocupación existe en expertos del área de la salud sobre un posible descontrol de la situación.

En conversación con el periódico Die Zeit, Christian Drosten, virólogo que aconseja al Ministerio Federal de Salud, afirmó que la tasa de mortalidad por Covid-19 puede aumentar si la toma de exámenes no logra cubrir la demanda y si es que la población mayor comienza a verse más afectada por esta enfermedad.

A eso se suma el estado de la red hospitalaria, tal como precisó Addo: “creo que nos hemos preparado tan bien como hemos podido. En nuestro hospital tenemos siete pacientes por Covid-19 en cuidados intensivos y tenemos suficiente espacio para muchos más”.

No obstante, si las hospitalizaciones saltan a 20 o más por día, la especialista admitió que en su recinto “podrían comenzar a tener problemas”.