Óscar Landerretche utilizó a Quilapayún para explicar su postura sobre la Política Nacional del Litio: “No podemos hacer una minería moderna y al mismo tiempo dejar contentos a Quilapayún", señaló.

Polémica causaron los recientes dichos del economista local Óscar Landerretche, quien utilizó al grupo Quilapayún en una analogía donde exponía su opinión sobre la Estrategia Nacional del Litio.

“No podemos hacer una minería moderna y al mismo tiempo dejar contentos a Quilapayún. No se puede hacer las dos cosas al mismo tiempo. Lo intentaron hacer así y yo no sé si salió muy bien comunicacionalmente”, señaló Landerretche, generando una ola de críticas al respecto.

Durante el fin de semana, los dichos del expresidente de Codelco causaron una respuesta formal del grupo a través de redes sociales, donde publicaron un texto alusivo al excandidato presidencial.

“Landerretche y sus empresarios / Que quieren el litio para lucrar / Los gerentes y millonarios / Que solo buscan donde ganar / No asistirán a mi funeral / No asistirán a mi funeral / No asistirán a mi funeral”, escribieron en sus cuentas.

Más tarde, tras el debate que generaron sus declaraciones, el economista expresó sus disculpas a la banda mediante la misma vía.

“Soy un admirador de su música y poesía desde hace décadas, los mal usé como un recurso literario en una entrevista y lamento haberlos ofendido. Fue una tontera. Mal hecho. ¿A quién no le ha pasado algo así? Mis sinceras disculpas”, señaló.

La respuesta del Quilapayún dirigido por Eduardo Carrasco no se hizo esperar: “Señor Landerretche, aceptamos sus disculpas y damos por terminado este incidente. Tomar conciencia de haber cometido un error comunicacional no es la mejor excusa. Pero los tiempos no están para mejores opciones. El Quilapayún no es un buen ejemplo para ilustrar el extremismo”, escribieron.

“Nuestro grupo tiene una larga trayectoria crítica de esas posturas. Y tal vez los políticos podrían sacar buenas lecciones de nuestra historia. Creemos haber logrado alejarnos de los extremos sin renunciar a lo esencial de nuestra vocación libertaria y democrática… Es finalmente de ese equilibrio que ha tratado nuestra desavenencia”, añadieron.