Tan antigua como la historia del ser humano es la narración oral, formato literario y performático que estimula la afectividad social, laboral, familiar, lo lúdico y callejero, cuando alude a la historia personal o colectiva, mediante relatos que incluyen mitos, leyendas, costumbres y creencias de la vida cotidiana de los pueblos.

Por Leopoldo Pulgar Ibarra

Algo de esto hay en el II Ciclo Cuenteando Ando Contando (Matucana 100) que se centra en los oficios, a través de cuatro propuestas que vinculan al espectador con los orígenes.

Dos de estos cultores son Omar Saldivia (“De las raíces a los frutos”) y Estéfani Díaz (“Un poema para curar a los peces”) quienes, esta vez, utilizan artefactos escénicos narrativos en sus cuentacuentos, además de la voz, el recurso ancestral.

Cuentos de Omar

Omar Saldivia, narrador oral desde 2010 que se desempeña en el área educacional, fabrica en su propuesta “bombas de semilla” con tierra, agua y semillas.

¿Se está recuperando la narración oral?

“Sí, hay un renacimiento de la oralidad, debido al desarrollo de la tecnología. En la medida en que la palabra escrita ha perdido hegemonía por lo digital se recurre a los lenguajes pre modernos, aunque la oralidad nunca se ha dejado de usar”.

La Historia Social de hoy recoge contenidos del relato oral…

“Efectivamente, la narración oral contribuye a la reconstrucción del tejido social y a la historia de un país, porque lleva un conocimiento que se comparte, como ha sucedido ancestralmente.

La historia matria no se construye desde los héroes masculinos ni de los grandes eventos, sino de lo sencillo y cotidiano. Hay un relato dominante que dice que la palabra escrita tiene mayor valor jerárquico que la palabra hablada.

“En cambio, desde la oralidad, la palabra escrita y hablada, el gesto, la mirada y otras formas se entienden como un bosque de lenguajes que tienen el mismo valor. No hay jerarquías. Además, en la narración oral el espectador tiene mayor peso que el dramaturgo, el intérprete, la música u otros recursos”.

Experiencias y homenaje

En tu relato, la semilla es lo fundamental…

“En obras anteriores sólo utilicé la voz, el gesto y el movimiento, pero `De las raíces a los frutos’ es un relato para guaguas, niñas y niños, por lo que creí necesario recurrir a la tierra y el agua: fabrico la ‘bomba de semilla’ que se ocupa para reforestar grandes espacio baldíos. Es parte de la guerra del bosque por no morir.

“Esta narración es un homenaje a Fidel Sepúlveda Llanos (gran investigador de la identidad y cultura tradicional y popular chilena, junto a Violeta Parra, Oreste Plath y Margot Loyola): decía que en nuestra identidad hay un conflicto entre lo indígena e hispano, ciudad y campo, dos almas que no se han encontrado… porque la educación y las artes no han hecho su trabajo.

“También recoge mi experiencia en una comunidad mapuche, en defensa de un territorio donde el arte es un aporte para conocer el mundo ancestral, y el recuerdo de mi abuelita, ligada a su huerta.
“Mi relato es un homenaje al oficio de la agricultura, un llamado a preservar su sabiduría entre las nuevas generaciones”.

Relatos de Estéfani

“Un poema para curar a los peces”, de Estéfani Díaz, profesora e investigadora, es el segundo relato del Ciclo Cuenteando Ando Contando. Lo protagoniza un niño que pregunta qué es un poema a la panadera, al mecánico de bicicletas y a un jardinero, para luego escribir uno que salve a su pez que se muere de aburrido.

¿Qué le da sentido al relato que presentas?

“La premisa de aludir a los oficios de este ciclo lo relacioné con lo que destaco en los cuentos que trabajo: los valores de la libertad para la infancia y el universo simbólico que permite el acceso de la poesía.

“Cuando este niño pregunta qué es un poema, cada persona responde desde su oficio, así rescata y valora lo que hace y muestra la belleza de su mundo interior: la panadera habla del sabor en la boca del pan recién hecho; el jardinero, del sonido del agua en la tierra y en las piedras… Ven la belleza de la vida”.

En tu caso, utilizas el teatro de sombras…

“Sí, por primera vez uso no sólo la voz y la palabra en un teatrillo de 50 por 40 centímetros que monto sobre una mesa. Ha sido un experiencia enriquecedora.

“También amenizo y creo ambiente con instrumentos musicales, ukelele, chain, al comienzo, cuando entran los personajes, en los clímax y al cierre”.

Voces y siluetas

¿Cuál es el rol de tu voz, desde las sombras?

“La voz es la narradora que conduce a los personajes al teatrillo. Cuando ellos asumen su rol… yo desaparezco.

“Los protagonistas son siluetas hechas en cartulina española doble, material más rígido que trabaja bien cuando se proyecta la luz desde atrás. También manejo una linterna para una luz diagonal”.

Tu corporalidad queda en segundo plano…

“La narración oral utiliza la palabra, el gesto y el movimiento. Pero hay escuelas que trabajan con artefactos narrativos, diversos objetos. Todo se puede transformar”.

Pero la voz es irremplazable…

“Es el vínculo aquí y ahora con el espectador y se pone al servicio de la historia: matiza, fija el silencio, marca ritmos, énfasis, clímax, tiñe el relato de diversas emociones.

“En mis cuentos nunca infantilizo las voces infantiles ni saco moralejas, además de buscar que sean lo más interactivos posible. La narración oral es algo ancestral del ser humano, por la necesidad de contar su historia… tal como se ha visto en las paredes de las ciudades de hoy”.

Otros cuentacuentos

Los otros dos relatos del mes en el II Ciclo Cuenteando Ando Contando son “El Mago Melric”, de Andrea Seguel (domingo 20): un hombre que trabaja duro para complacer al rey y a su pueblo, y que una mañana descubre que su magia ha desaparecido lo que trae incertidumbre, porque no sabe por qué perdió sus poderes ni qué hacer sin magia.

“La bicicleta de mi vida”, de Juan Pablo Vallejos (domingo 27), cuentacuentos musicalizado, narra el encuentro mágico e inolvidable de un niño con su bicicleta y la memoria de la vida en el campo: calles de tierra, la sombra bajo el sauce, el olor a pan amasado, la noria y el fogón en la noche estrellada.

“De las raíces a los frutos” (6)
“Un poema para curar a los peces” (13)
“El Mago Melric” (20)
“La bicicleta de mi vida” (27)
M100. Zoom y Youtube, domingo 12.00 horas.
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