La 70 Berlinale arranca este jueves con 18 filmes en liza por el Oso de Oro, incluidas una cinta argentina y otra brasileña, pero su ceremonia de apertura estará marcada por la doble matanza perpetrada en Alemania.

“Estamos muy entristecidos por lo que pasó en Hanau”, indicaron los organizadores del festival de cine de Berlín, expresando su pésame a “las víctimas y las familias” del ataque posiblemente xenófobo que dejó once muertos cerca de Fráncfort.

Las actrices Sigourney Weaver y Margaret Qualley -hija de Andie MacDowell- abrirán en la noche uno de los festivales de cine más importantes de Europa junto a Cannes y Venecia con My Salinger Year, una historia sobre la creación literaria y la ambición profesional que se presentará fuera de competición.

La brasileña Todos os Mortos, ambientada a finales del siglo XIX, junto a El prófugo, un thriller psico-sexual firmado por la argentina Natalia Meta y protagonizado por Érica Rivas, competirán por el Oso de Oro por América Latina acompañando a Siberia, una coproducción mexicana de Abel Ferrara, y First Cow, de la estadounidense Kelly Reichardt.

También destaca The Roads not Taken, de la británica Sally Potter, en la que Javier Bardem interpreta a un discapacitado mental asistido por su hija (Elle Fanning).

La Berlinale presentará paralelamente El Tango del Viudo y su Espejo Deformante, una película que el cineasta chileno Raúl Ruiz, fallecido en 2011, empezó en 1967 y dejó sin terminar por falta de fondos.

Además, nuestro país será el país invitado en el Mercado Europeo de Cine, que se celebrará en junto a la Berlinale.

“Hardcore”

Otras aspirantes a suceder a “Sinónimos. Un israelí en París”, ganadora del Oso de Oro el año pasado, son There is no Evil, del disidente iraní Mohamad Rasoulof, y DAU. Natasha, uno de los filmes del controvertido proyecto del ruso Ilya Khrzhanovskiy, que recreó una ciudad soviética donde filmó la vida de 400 personas, cargada de violencia y pornografía.

“La mayoría de las escenas de este proyecto son hardcore, no solo este filme”, previno la semana pasada el nuevo codirector del festival Carlo Chatrian, anticipando la polémica.

En conjunto, la selección de este año mira al mundo actual “sin ilusión (…) para abrirnos los ojos”, agregó.

El palmarés será anunciado el 29 de febrero por el jurado presidido por el actor británico Jeremy Irons e integrado entre otros por el director brasileño Kleber Mendonça Filho (Bacurau) y la intérprete francesa de origen argentino, Berenice Bejo.

En la tradicional rueda de prensa del jurado, Irons salió al paso de unas declaraciones pasadas redifundidas por la prensa alemana al defender su apoyo al “movimiento para proteger a las mujeres contra toda forma de acoso”, al derecho al aborto y al matrimonio gay.

“Espero que algunas de las películas que veremos hablarán de estas cuestiones (…) y nos incitarán a cuestionar nuestras actitudes, nuestros prejuicios”, dijo el actor británico.

Pasado nazi

La británica Helen Mirren recibirá el Oso de Honor mientras que una de las recompensas más emblemáticas de la Berlinale, el Premio Alfred Bauer, fue retirado después de que saliera a la luz el pasado nazi del primer director del festival (1951-1976). En su lugar, se otorgará un Oso de Plata.

Los nuevos directores de la Berlinale, Chatrian y Mariette Rissenbeek, anunciaron por otro lado la creación de la competición Encounters, para dar cabida a obras más arriesgadas.

En esta se encuentran Los Conductos, ópera prima del colombiano Camilo Restrepo, e Isabella, la nueva entrega de la saga del argentino Matías Piñeiro, en torno a las protagonistas femeninas de la obra de Shakespeare.

Fuera de competición, la excandidata demócrata Hillary Clinton es esperada para presentar su miniserie autobiográfica Hillary en plena precampaña en Estados Unidos, mientras Pixar proyectará su nueva película de animación Onward y Cate Blanchett la serie Stateless centrada en historias de migrantes.

El cine brasileño, “en su mejor momento”

El festival, que reivindica su compromiso con la diversidad, seleccionó en sus secciones paralelas unas 300 películas de todo el mundo, con una fuerte presencia argentina y brasileña por parte latinoamericana.

En total, “19 filmes brasileños” fueron seleccionados en la Berlinale, se congratuló el jueves Mendonça Filho.

“Estamos en el mejor momento de la historia del cine brasileño”, pese a que su industria “está siendo desmantelada casi a diario”, añadió el cineasta, crítico con el presidente ultraderechista Jair Bolsonaro y sus recortes a la cultura.

En la sección “Panorama”, Clarisa Navas presentará Las Mil y Una, la historia de amor entre dos jóvenes mujeres, mientras que el brasileño Karim Aïnouz proyectará el documental Nardjes A.