“Soy el primero en reconocer que muchas veces he sido un imbécil”. Con esta declaración, el cineasta Nicolás López entró a la discusión sobre el acoso sexual en el negocio del espectáculo y esbozó un “mea culpa” a raíz de la ola de denuncias tanto en el ámbito local como extranjero.
En diálogo con el diario La Tercera, el director de Que Pena Tu Vida reveló que abordará el tema en un nuevo filme, uno de los tantos que tiene en mente para los próximos meses (entre ellos, las adaptaciones para el continente de Sin Filtro).
Sobre el proyecto, López lo resume así: “Esta es una película que se ha ido armando de forma orgánica. Y que tiene que ver con repasar también la historia de uno como hombre (…). Todos tuvimos que aprender a porrazos, sin guía, cómo relacionarnos con el género femenino”.
En la misma línea, dedicó palabras al movimiento #MeToo y los cambios que propone para la sociedad: “Con el movimiento #MeToo hay cosas que son pensadas de modo distinto, me parece maravilloso que la gente tenga ahora esa capacidad de denunciar (…). Pero también hay toda una zona, que es de lo que habla un poco la película, que dice ‘yo también’, pero es un ‘yo también’ distinto y tiene que ver con cómo los hombres tenemos el deber de reflexionar sobre nuestro pasado, todos tenemos formas de machismo en la sangre”.
De acuerdo a la publicación, a raíz de sus polémicas últimas entrevistas y con el objetivo de mejorar su relación con los medios, López contrató los servicios de Imaginacción, la misma empresa de comunicación estratégica que por estos días asesora a Herval Abreu, imputado hoy por violación y acoso sexual.
Sin embargo, y a pesar del ímpetu de este nuevo proyecto, la historia aún no se traduce en un guion cinematográfico: “Estamos trabajando (…). Viendo qué significa el acoso y ahí te empieza a dar vergüenza ajena todas las veces que uno como hombre ha sido desubicado, torpe en la seducción, muy insistente, o jote”, reconoció, para luego adoptar un rol autocrítico.
“Quién no ha dicho chistes fuera de lugar pensando que son divertidos, pero de pronto te das cuenta que estabas hiriendo a gente. Como hombres también tenemos que hacer nuestro #MeToo del ‘yo también he sido un imbécil’ y revisar nuestra historia. Es súper bueno hacer una película sobre la forma como nos vamos a relacionar entre hombres y mujeres a partir de ahora”, reparó el director.
Consultado sobre si se arrepiente de alguna actitud abusiva hacia mujeres en su trabajo, López respondió: “No así como una situación puntual, no hay nada que tenga que ver con eso. Pero hay muchos tipos de chistes, cosas que uno ha dicho o veces que uno ha sido jote, y soy el primero en reconocer que he sido un imbécil miles de veces”.
En contraste con algunos de sus dichos más polémicos (“Siempre he tenido la oportunidad de estar rodeado de minas, que a veces uno las puede emborrachar”; “me fascinan las mujeres y soy un degenerado. Para hacer películas tienes que ser un degenerado”), el cineasta aclaró que lo suyo nunca fue el acoso en sí, sino su condición de “jote”.
“(Siento) que soy un imbécil, obviamente. Son cosas que uno piensa que son un chiste, pero son bastante más heavy, tienen que ver con la educación y las fracturas que uno tiene como hombre (…). Los hombres que hemos sido desubicados tenemos que hacer un mea culpa y pedir perdón.”, dijo.
