Los accidentes fatales en la Ruta 146, que une a Concepción con Cabrero, ya se han convertido en un escenario habitual para los vecinos de esta vía, particularmente en la localidad de Tomeco, donde se registró un nuevo choque frontal de alta energía el domingo pasado y que dejó como saldo a una mujer fallecida y 5 personas lesionadas, sumando ya 26 muertos y 76 lesionados, sólo en ese lugar entre los años 2015 y 2016.
Maricel Valdés es dirigenta vecinal de Tomeco. Con angustia, relata que no recuerda alguna época con tantos muertos y accidentes, asegurando que transita con miedo y que cambió su rutina para evitar la vía. “Hemos sido testigos de un montón de estos accidentes y de verdad que a veces no sabías qué tramo tienes que tomar y por dónde era el camino. Todo era incierto”, aseguró.
Desde Obras Públicas, el seremi René Carvajal reiteró que los accidentes no son producto de los trabajos y de las señales, aunque admite que Carabineros debiera aumentar los controles carreteros para prevenir nuevas tragedias.
“No es producto de una mala señalética”, indicó Carvajal, apuntando a que “algo está pasando con los conductores, no están cumpliendo las normas de tránsito en general, se están metiendo en cualquier parte y eso puede estar generando confusión”.
Carabineros reconoce que en Tomeco es donde se registra la mayor cantidad de accidentes. Sin embargo, el subprefecto de Servicios de Bío Bío, Erick Flores, afirmó que este es el lugar de la ruta donde más se producen accidentes y que hay sectores donde fiscalizar se hace casi imposible, por medidas de seguridad.
“Al seremi tenemos que informarle que en ese sector de Tomeco existe un retén permanente con Carabineros, cuya labor principal es el control vehícular”, expresó Flores, argumentando que han aumentado en un 330% las infracciones a los conductores en el lugar.
Ya van 30 choques y 19 fallecidos en menos de 5 meses, una cifra que se incrementa ante la preocupación de los automovilistas, autoridades, policías, pero también los vecinos de la ruta Concepción – Cabrero, que esperan volver a transitar con seguridad, por un camino que está cobrando víctimas fatales cada semana.