En prisión preventiva por constituirse un peligro “latente y constante” para la sociedad, según lo expresado por el magistrado de garantía de Río Negro Jorge Saavedra, fue dejado F.J.C.V., el educador intercultural de 50 años que fue sorprendido con explícito material pornográfico infantil en un pendrive.

Por más de dos horas se desarrolló la audiencia de formalización de cargos de este hombre de 50 años, donde la Fiscalía con una serie de datos reunidos en las últimas horas, reforzaba su postura respecto a que el sujeto era propietario del pendrive que mantenía más de 40 imágenes de niños y niñas de entre 6 a 10 años, efectuando posiciones de alta connotación sexual o ya interactuando sexualmente.

El imputado, se informó en la audiencia, le dijo a la técnico parvularia que semanas atrás había acudido a un cyber café para descargar material de apoyo a sus clases y ahí supuestamente le habían cambiado el pendrive.

Tras la resolución, la fiscal jefe de Río Negro, Leyla Chahín, señaló que la idea de almacenar este tipo de imágenes solo tienen un fin: el excitarse viéndolas, y teniendo en consideración que dicho proceso es a través de material donde hay niños involucrados, es que se requiere que el hombre sea alejado de la sociedad con la que tiene contacto.

Una versión diametralmente opuesta es la que mantiene Iris Cañulef, esposa del imputado, quien reconoció que fue ella la que descargó información al dispositivo, añadiendo que presume que ahí pudo haber bajado de la web las imágenes por equivocación.

La mujer dijo estar tranquila y esperando que por esta vez la justicia actúe, ya que insistió en que se habría cometido un error enorme al señalar a su marido como una persona que almacena pornografía infantil para satisfacción personal.

En lo referente al arma de fuego encontrada en el domicilio del imputado, Cañulef dijo que ésta fue un regalo de unos ex alumnos, que se trataba de un arma de colección y que su esposo actualmente le efectuaba mantención, y no una escopeta hechiza como informó el Ministerio Público.

La fiscal Chahín en tanto, reiteró que el hombre debía estar privado de libertad mientras continúa la investigación, ya que hay una serie de incongruencias que quedaron en evidencia, donde el imputado dice que el pendrive se lo cambiaron, luego que era un virus, para finalmente asignar responsabilidad a su esposa, a través de una serie de comentarios que fueron entregado durante este viernes.

Desde la Junji en tanto, el director regional Sergio Uribe, destacó el rápido actuar de la funcionaria que advierte el material pornográfico y a pesar de la solicitud del educador de que ello quedara en nada, dio cuenta a sus jefes para luego poner en conocimiento de la PDI el hallazgo.

Para tranquilidad de los padres y apoderados del Jardin Infantil Amancay, dijo Uribe, es que Junji tomará acciones legales al respecto, presentando una querella contra el hoy imputado.

Según el abogado defensor, de ser declarado culpable su cliente, arriesgaría una pena que oscila entre los 541 días de cárcel a los 3 años, vale decir en ningún caso una pena de crimen, y que de reconocerse las atenuantes de irreprochable conducta y colaboración, su posible sentencia no sobrepasaría los 300 días, por lo que a su juicio era desmedida una prisión preventiva.