Una vida saludable, se relaciona a una buena alimentación, ya sea en cantidad como en calidad, estos factores ayudarán a nuestro organismo a presentar un mejor bienestar. Esto último se verá potenciado con el ejercicio, ojalá a diario, pero los chilenos no presentamos los mejores índices de actividad física.

Precisamente cuando lo sabroso nos lleva a comer de más, lo sano no es hacer dieta, sino hacer más ejercicio. Y cuando hablamos de hacer ejercicio no nos referimos solo a ponernos zapatillas saliendo a trotar, lo que en si es muy saludable, bien bastaría dejar de lado el sedentarismo.

Contexto de sedentarismo en Chile

Las grandes instituciones de salud mundial, han informado que en el mundo mueren, al año, alrededor de 5,1 millones de personas por el tabaco, 2,8 millones por la gran ingesta de alcohol y por el sedentarismo 5,3 millones de personas.

Según la Encuesta Nacional de Hábitos de Actividad Física y Deportes en la Población Chilena de 18 y más, realizada por la Universidad de Concepción en el 2012, reveló que el 82,7% de los chilenos se declara sedentario.

Una cifra preocupante, ya que el 10% de las Enfermedades Crónicas no Transmisibles (ECNT) están relacionadas con la falta de actividad física.

Dado este contexto, ya el mes pasado varias asociaciones médicas del país se unieron para crear la “Coalición Mover”, una iniciativa inspirada en la campaña inglesa Move1, que resaltó las consecuencias negativas del sedentarismo.

Ya hemos logrado conocer, a través de diversos expertos la importancia de la alimentación, sobre todo en su calidad y cómo podemos hacer está más económica. Sin embargo, este primer factor no es suficiente para que nuestro organismo tenga un bienestar óptimo, necesitamos ejercicios.

Una de las maneras más económicas de hacer ejercicio, que toma poco tiempo e incluso es práctico: Caminar.
Según expertos, media hora al día es más que suficiente para nuestro cuerpo, esto se puede implementar camino al trabajo, para aquellos que tengan la posibilidad, o después de la oficina una vuelta al barrio.

Esto con cuerda con la definición de la OMS con respecto a una persona considerada no sedentaria, “aquella que realiza algún tipo de actividad física moderada 150 minutos a la semana”.

“Unas porciones bien distribuidas, con alimentos que nos den energía, sin grasas saturadas y más aceite vegetal, acompañado con ejercicio es una excelente combinación. Basta con caminar después del trabajo, subir escaleras y en una inversión, una bicicleta camino al trabajo”, comentó la nutricionista Pamela Reyes.

Los beneficios del ejercicio

Estudio de la Red de Salud Christus, refleja que “la actividad física regular es importante para el corazón y mente. Se ha demostrado que el ejercicio físico regular puede reducir el riesgo de tener un infarto al corazón o morir por esa causa en un porcentaje que fluctúa entre 35y 45%”.
Otros beneficios:
- Mejora la circulación sanguínea de los pulmones, del corazón y los músculos.
- Puede ayudar a manejar el estrés.
- El ejercicio contribuye a perder kilos o mantener el peso.
- El ejercicio regular ayuda a elevar el nivel de colesterol “bueno” o HDL y a reducir los triglicéridos.
- El ejercicio disminuye el riesgo de desarrollar diabetes, ya que mejora la sensibilidad a la acción de la insulina.
- La actividad física también puede reducir la presión arterial y el riesgo de tener diabetes