Trabajadores de la constructora JPI, que dejó abandonadas las obras de reconstrucción de casas patrimoniales en Lota, presentaron una demanda contra la empresa porque también a ellos se les engañó dejándolos sin el pago de sueldos, imposiciones y finiquitos.
El abandono de los trabajos de reparación de daños causados por el terremoto en casas centenarias de Lota Alto, tiene a decenas de familias viviendo en la más absoluta indignidad, hacinadas en sus propias viviendas en espera que alguien se haga cargo del término de las obras.
El proyecto tenía una duración de seis meses, desde octubre a mayo, sin embargo, a juicio de los afectados, JPI demostró desde un comienzo no tener solvencia. Aseguran que las pocas veces que fueron, llegaban con escasas herramientas y materiales.
Así también lo confirman los propios trabajadores contratados por la constructora para este proyecto, y que hoy presentaron una demanda laboral por que de un día para otro se encontraron con la oficina cerrada sin ser indemnizados.
Eduardo Carrasco, vocero de los 18 trabajadores que interpusieron la demanda laboral, dice que la empresa los engañó a todos.
Al igual que los vecinos, que están indignados por la respuesta que entregó a sus reclamos el director del Serviu, Eloy Grandón, quien dijo desconocer el asunto y los llamó a acudir al servicio para buscar una solución, los trabajadores afirman que él conoce perfectamente del problema, porque incluso se reunió en Lota con ellos.
La Radio intentó conversar con el seremi de Vivienda, Jaime Arévalo, a quien los afectados han apuntado por ser un entendido en la historia patrimonial de la comuna, sin embargo, la autoridad declinó referirse al asunto.