De espaldas a la Comisaría de Coyhaique.
Así concluyó la marcha que este mediodía protagonizaron bajo la lluvia decenas de familiares, amigos y vecinos de Iván Vásquez Vásquez, quien falleciera a principios de este mes en Chile Chico luego de ser detenido por efectivos de Carabineros de esa localidad.
Aunque la primera versión de la policía uniformada fue suicidio por ahorcamiento con una polera, el certificado extendido por el Servicio Médico Legal fue contundente: shock hemorrágico, producto de lesiones internas, el que ocasionó un fallo multiorgánico al no ser tratado a tiempo.
Julián Vásquez, primo del hombre de 39 años, encabezó la caminata que se inició en la plaza pentagonal de la ciudad y que concluyó en la plaza del ovejero de Avenida Baquedano, frente al cuartel policial. En el lugar hizo un llamado a que se esclarezcan los hechos, informando que no se detendrán en las movilizaciones en búsqueda de la verdad de lo ocurrido.
Cuestionó, además, que los funcionarios involucrados estén con permisos especiales y no hayan sido relevados de sus funciones.
Juan Leuquén, esposa y madre de tres pequeños niños, también aludió a esta situación. “En estos momentos en Chile Chico están de vacaciones. Mi pregunta es por qué en Chile una persona por hambre o necesidad mata una gallina y tiene cinco años y un día de cárcel, y estas personas que mataron a mi marido, que se ensañaron con él, están de vacaciones”.
Y acto seguido se preguntó: “¿Dónde está la justicia? No importa que esto se demore, porque gracias a esos infelices, yo tengo todo el tiempo para esperar”.
La familia de Iván Vásquez agradeció en la ocasión el apoyo de la Comisión de Derechos Humanos, el Servicio Paz y Justicia, y diversas organizaciones que han respaldado sus acciones. Dentro de ellas, el que se haya nombrado un ministro en visita para investigar los hechos.
El acto concluyó con velas encendidas y pañuelos blancos al viento.