El juicio del atleta paralímpico sudafricano Oscar Pistorius, quien mató a balazos a su novia en febrero de 2013, se reinició este lunes en Pretoria, tras dos semanas de receso, con el interrogatorio de la primera persona que llegó al lugar del crimen.

Se trata de Johan Stander, gerente de la residencia donde vivía el atleta, a quien Pistorius llamó después de haber disparado contra su novia Reeva Steenkamp, el 14 de febrero de 2013.

Stander, que formaba parte de la lista de testigos de la acusación, fue finalmente convocado a pedido de la defensa. Visiblemente emocionado, dijo que había recibido un llamado del deportista a las 03:18 horas, la madrugada de la tragedia.

Según los peritajes, Pistorius mató a Reeva Steenkamp a las 03:17 horas, cuando se encontraba en el baño.

“Por favor, por favor, ven a mi casa, disparé contra Reeva, creía que era un intruso”, dijo Pistorius, que estaba llorando, según Stander. “Era como si estuviera desgarrado, quebrado, desesperado, implorando”, dijo Stander.

Pistorius, de 27 años de edad, arriesga una pena de cárcel de 25 años si el tribunal lo reconoce culpable del asesinato de Reeva Steenkamp, una modelo de 29 años a la que conocía desde hacía tres meses.

De acuerdo al fiscal Gerrie Nel, el atleta mató a Steenkamp tras una discusión en la cual la modelo dijo que quería volver a su casa.

Nel acusó a Pistorius de haber matado intencionalmente a su novia que se había refugiado en el baño para huir de su furia, cuestionando una vez más la versión del deportista, quien afirma que la mató a balazos por error, creyendo que era un ladrón.

El tribunal, que en los próximos días escuchará a una docena de testigos citados por la defensa, quiere que las audiencias terminen el próximo 16 de mayo. Sin embargo, la acusación podría citar a nuevos testigos, prolongado este juicio que tiene en vilo a Sudáfrica desde el 3 de marzo pasado.

Después de las audiencias, el fiscal Gerrie Nel y el abogado Barry Roux transmitirán sus conclusiones por escrito a la jueza Thokozile Masipa, que tendrá que dar su veredicto.

Thokozile Masipa, que dedicó el receso de dos semanas a estudiar las 2.000 fojas del expediente, podría esperar varias semanas antes de pronunciar el veredicto.