El sistema frontal que afecta a la zona centro y sur de Argentina ha causado muchos problemas. Cuatro muertos, temporales de lluvia y granizo, 500 evacuados en las provincias de Catamarca, Santiago del Estero y otros 500 más en Neuquén.
Bariloche, en el sur trasandino, también ha sufrido los efectos del aguacero que no para hace 72 horas. Y en el medio de la ciudad, los pilotos que esperaban iniciar el Rally Ruta 40, acusaron el golpe con la suspensión de la primera etapa.
“Tenemos lluvia hace tres días, eso malogró los caminos, pero básicamente el problema más grande es que no tenemos visibilidad para el helicóptero médico, y en este tipo de competencias la seguridad de los competidores no la negociamos. Entonces hoy nos quedamos acá, dicen que para mañana mejorará un poco el pronóstico y trataremos de largar repitiendo la primera etapa”, explicó el director de la carrera, el argentino Pablo Eli.
Para el piloto chileno Pablo Quintanilla tampoco fue grata la noticia, más aún luego de varios días en Bariloche esperando el comienzo del Dakar Series.
“Es lamentable, viajamos muchos kilómetros para estar en la carrera, pero la seguridad de los pilotos está por sobre todas las cosas. Aunque es un rally muy importante, si la organización determinó que no era seguro largar en estas condiciones, hay que respetarlo. Solo nos queda esperar que el clima nos acompañe para mañana y el resto de la semana”, comentó el piloto.
Y añadió: “Mañana en la madrugada tendremos otro briefing, ahí nos dirán si es posible repetir la primera etapa o si definitivamente dejamos Bariloche y nos vamos en enlace hasta Zapala para correr la tercera especial el miércoles”.
