El mito urbano dice que los hombres bajan de peso más rápido que las mujeres, pero ¿qué tan cierta es esta creencia?

La verdad es que en cierto modo sí. Tal como señalan en CNN Internacional, los varones suelen tener más tejido muscular magro, lo que hace quemar más calorías, incluso estando en reposo. Además, indican que si hombres y mujeres recortan de su dieta el mismo número de calorías, es probable que sean ellos los pierdan más kilos…pero sólo en un principio.

“A largo plazo, el campo de juego es más igualitario”, dice el nutricionista estadounidense David Grotto, quien llama a no ver como una competencia esta situación.

Por otro lado, algunos programas para bajar de peso marcan esta creencia popular, porque al poco tiempo de comenzar estos planes, los hombres pierden mucha grasa corporal y las mujeres no tanto.

Un estudio realizado por diversos expertos y publicado en la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, puso a prueba diversos sistemas de pérdida de peso como la dieta Atkins, suplementos Slim- Fast y el método Weight Watchers para ver las diferencias entre sexos. A los dos meses de iniciado el tratamiento, los hombres habían perdido el doble de kilos que las mujeres y tres veces más de grasa corporal. Sin embargo, a los seis meses, la tasa de pérdida de peso era igual entre chicas y chicos.

Según explican, desde la pubertad las mujeres tienen en promedio entre un 6 y un 11% más de grasa corporal que los hombres, aunque coman menos. Esto respondería a una adaptación evolutiva que ayuda a las féminas durante el embarazo.

Pero el hecho de que ellas tengan más depósitos de grasa no significa que sean menos saludables o más “gordas”. Como los hombres acumulan más grasa en el vientre, cuando pierden peso también se nota más, porque es la parte con mayor reducción de volumen. En cambio, las mujeres suelen almacenar la grasa en forma más dispersa en el cuerpo y al bajar se nota menos, porque la disminución de volumen es gradual y no tan localizada.

David Katz, académico de la Escuela de Medicina de la Universidad de Yale, dice que “las mujeres con exceso de grasa en la parte media (abdomen) pierden peso más o menos con la misma facilidad que los hombres”, añadiendo que en general son los hombres los más propensos a aumentar de peso en esa zona.

Cabe destacar que la acumulación de grasa en el vientre se asocia al aumento del riesgo de enfermedades cardíacas. Dicho esto, los hombres con sobrepeso tienden a ser menos saludables que las mujeres con kilos de más.

Katz dice también que la grasa más difícil de reducir es la de los muslos y traseros, pero estos sectores son los menos perjudiciales para acumular peso. Algo que favorece a las chicas, pues son ellas las que suelen acumular más volumen en esta zona.