Las declaraciones del diputado DC Sergio Ojeda, quien remarcó que la Gobernación de Osorno debiese quedar por justicia en manos de un representante de las filas falangistas, tuvieron inmediata respuesta por parte de representantes de partidos que conforman la Nueva Mayoría.
El parlamentario demócrata cristiano abrió el flanco en torno a la disputa existente al interior del futuro conglomerado de gobierno en cuanto a la nominación de personas en los cargos de confianza que aún resta por definir.
En esta carrera Ojeda ya dio la primera zancada, mostrando la intención de la DC de quedarse sí o sí con dicho cupo, recuperando la ya histórica presencia falangista en la cabecera provincial.
Sin embargo, para el concejal y presidente comunal del PPD, Juan Carlos Velásquez, las cosas aún no están definidas y no se puede decir que por justicia un partido tiene más derecho que otro para instalar a alguno de sus representantes en la gobernación provincial de Osorno.
Por su parte, el presidente comunal del Partido Radical Social Demócrata, René Carrasco, compartió el juicio de Velásquez, en el sentido de que todos los partidos de la Nueva Mayoría tiene el derecho de aspirar al citado cargo.
Asimismo, comentó que la DC ya no es la misma que la de los 90, sosteniendo que el 30% que marcaban en aquel tiempo ha caído a la mitad. Ante ello, no dudó en aventurar que los radicales también tiene derecho a pretender la gobernación.
Quien sostuvo una visión distinta fue el presidente provincial del Partido Socialista, Francisco Reyes, el cual remarcó que el acento no debiese estar en la tienda política que se queda con la gobernación, sino en que la persona sea la más acorde de acuerdo al programa de Bachelet.
De acuerdo al dirigente político, combatir la desigualdad es quizá el mejor objetivo que debe tener quien ocupe tal cargo, más allá de tener más o menor poder dentro de la Nueva Mayoría.