El cantante aficionado, Rodrigo Ruíz, entabló la demanda contra la intérprete por pedirle favores sexuales a través de internet, a cambio de impulsar su carrera musical.

Sucedió en 2008, cuando estaba casada con Marc Anthony, pero recién ahora ha salido a la luz la demanda interpuesta contra ella por un hecho sucedido ese año.

El demandante es Rodrigo Ruíz, quien asegura en los documentos que ha remitido a un tribunal de California, que la estrella del pop le prometió, hace 6 años, patrocinar su futura trayectoria artística a cambio de algunas condiciones.

Entre ellas, el envío de varias fotografías que revelaran su estado físico sin ningún tipo de pudor y una maqueta con varias canciones que supuestamente serían evaluadas personalmente por la cantante, según publicó el portal TMZ.

Además, Rodrigo exige a Jennifer una indemnización de 10.000 dólares por el trato humillante y vejatorio al que, en su opinión, le habría sometido a través de la correspondencia, pese a que la investigación judicial que ya ha sido puesta en marcha tiene indicios de que el origen de estas peticiones no tiene nada que ver con la intérprete neoyorquina, sino con una mujer de 53 años que se habría hecho pasar por ella para estafar a la víctima.

Por su parte, el equipo legal de la estrella ha tomado la demanda como una broma de mal gusto y, como publica el diario New York Daily News, ha arremetido duramente contra Rodrigo por buscar “notoriedad pública” a cualquier precio.

“Creemos que la demanda interpuesta por este señor debería ser rechazada inmediatamente. Este es el típico caso de una persona que quiere conseguir notoriedad pública de cualquier manera. Jennifer Lopez no lo conoce y nunca se ha puesto en contacto con él”, explicó el representante al mismo medio.