Un sistema de protecciones e iluminación mejoraron la fachada de las ruinas del Teatro del Liceo Enrique Molina. Ahora el Monumento Histórico Nacional queda a la espera de un proyecto que restaure definitivamente su estructura.
Una reja metálica perimetral de tres metros de altura, más un moderno sistema de iluminación fueron instalados en las ruinas del teatro, que fue construido entre los años 1929 y 1935, por el arquitecto chileno Onofre Montané.
Con una inversión de 18 millones de pesos, el propósito es recuperar el patrimonio cultural, otorgándole mayor seguridad para que sea percibido así por los penquistas.
La iniciativa se concretó luego de un acuerdo de cooperación firmado entre la Municipalidad de Concepción y la Cámara Chilena de la Construcción, la que entregó los recursos. Así lo confirmó Miguel Angel Ruiz-Tagle, presidente de la entidad, quien destacó el proyecto.
El alcalde de Concepción, Álvaro Ortiz, valoró las mejoras en la medida en que permitirá brindar una mayor sensación de seguridad a los vecinos del sector. Además recordó la idea de restaurar en forma definitiva este espacio.
Las ruinas del Teatro del Liceo Enrique Molina poseen la calidad de Monumento Histórico Nacional desde el año 2009, por su aporte al patrimonio de la zona.