El zoológico de Belgrado en Serbia dio la bienvenida a un nuevo integrante el pasado jueves. Un cachorro de león blanco que tiene enamorados a los visitantes del recinto.

La pequeña hembra pesó 1 kilo 300 gramos al nacer y su madre, una leona llamada Masha que llegó a la capital serbia procedente del parque nacional sudafricano Kruger en 2006, se encuentra en perfectas condiciones.

El cachorro tiene a todos muriendo de amor por ella y sus cuidadores han grabado sus primeros intentos para aprender a rugir, aunque por ahora su fiereza es similar a la del un peluche con el que ha sido fotografiada.

Aunque el nacimiento de un nuevo ejemplar de esta especie pueda parecer una buena noticia, existe gran controversia sobre los programas de cría de leones y tigres blancos.

Según recoge el Huffington Post, la organización Big Cats Rescue, señala que la única manera de lograr un programa de cría de leones es a través de la endogamia, lo que puede causar defectos genéticos que les provoquen enfermedades.

http://youtu.be/ltKjuP0Yn-I