Con arresto domiciliario total quedó Ángelo Díaz Alarcón, de 20 años, sindicado como el autor de al menos uno de los falsos avisos de bombas en establecimientos educacionales de la comuna de Osorno durante esta semana.

Tal fue la determinación del Juzgado de Garantía de Osorno, luego de escuchar los argumentos tanto del Ministerio Público, como de la defensa del imputado, quien argumentó que la medida de prisión preventiva era exagerada en relación al tipo de delito que se sindica, posición que fue compartida por la instancia resolutoria.

Pese a ello, la Fiscalía se mostró conforme con la determinación del tribunal, argumentando que la detención del imputado se dio luego de diversas pericias efectuadas por carabineros, que determinaron que Díaz Alarcón había efectuado al menos uno de los llamados registrados durante esta semana anunciado falsamente la existencia de artefactos explosivos, principalmente en el Liceo Eleuterio Ramírez, donde el joven de 20 años cursa cuarto medio.

De acuerdo a María Angélica de Miguel, fiscal jefe de Osorno, declaraciones de compañeros de cursos del imputado habría ayudado a comprobar su participación, explicando que para cometer el delito habría quitado un aparato celular a otro estudiante para efectuar la llamada, enfatizando en que no se trata de una jugarreta, sino de la comisión directa de un delito.

La fiscalía acusa al joven de 20 años de amenazas y crear alarma y calamidad pública, al desplegarse luego de los falsos avisos de bomba intensos operativos de evacuación y despliegue de recursos de carabineros.

Desde la Defensa en tanto, liderada por el abogado José Manuel Rebolledo se argumentó en la audiencia que la situación denunciada puede ser calificada como atípica, no teniendo entonces una tipificación ni una sanción, aún cuando el profesional reconoció que los actos del imputado ameritan una sanción.

Respecto al tiempo de investigación, en la audiencia no se determinó esperándose que tanto el Ministerio Público, como la defensa soliciten una nueva cita para determinarlo. Por el momento, Díaz Alarcón no podrá salir de la ciudad ni menos de su hogar, de día ni de noche mientras duren las pesquisas, arriesgando en la actualidad una pena de 541 días de presidio.

Sin embargo, la fiscal María Angélica de Miguel aclaró que restan recabar varios antecedentes, por lo que advirtió que si se establece su participación en más llamados de avisos de bombas el delito pasará a ser reiterado, con lo cual las penas podrían aumentar en un grado.