Por “ejercicio ilegal de la profesión” fue condenado un falso martillero público que operaba en la comuna de Parral, tras de ser detenido por sus acciones ilícitas.
El hombre, Jorge Héctor Zúñiga Tapia, de 56 años, quedó al descubierto cuando una víctima se mostró disconforme con los productos que aparecieron a remate en un local en Parral, arrendado especialmente para la ocasión. Esto originó una denuncia ante el Ministerio de Economía y los antecedentes quedaron en manos del Ministerio Público.
De esta forma comenzaron las diligencias para establecer si era o no un martillero público habilitado para ejercer dicho oficio y, luego de varios meses de indagaciones, el fiscal jefe de Parral, Nelson Riquelme, pudo contar con todos los antecedentes en sus manos que motivaron un juicio oral simplificado en el tribunal de esa comuna.
Riquelme al respecto dijo que “se trata de un imputado que anteriormente detentaba de esa calidad, pero en el año 2004 le fue cancelada su autorización para ser martillero público y, por lo tanto, fue eliminado de los registros que de acuerdo a la ley que regula dicha actividad y donde deben estar inscritas aquellas personas que se desempañan como martillero público”.
“Pero -agregó- esta persona continuó efectuando ventas en subastas y por lo tanto ejerciendo funciones de martillero sin serlo. La ley que regula esto establece expresamente una figura penal para las personas que no cumplen los requisitos legales y no estando inscritas en los registros correspondiente, ya sea porque se le canceló su inscripción o no cumplen con los requisitos, no pueden ejercer esa actividad y si lo hacen cometen un delito cuya pena es similar al ejercicio ilegal de una profesión”.
A pesar de que el acusado aseguró que vendió de manera directa productos que le pertenecían, lo cierto es que todo se realizó en una subasta pública al mejor postor. Es por todos estos antecedentes, incluyendo las declaraciones de testigos, que el magistrado Luis Sumonte acogió los argumentos presentados por la fiscalía y determinó que Zúñiga Tapia es culpable del delito de “ejercicio ilegal de la profesión”, por lo que arriesga una pena de 61 días a tres años de prisión. La pena deberá cumplirla de manera efectiva debido a que posee condenas anteriores por otros delitos.
La lectura de la sentencia finalmente será el próximo lunes 22 de julio, a las 10:45 horas, en el Tribunal de Garantía de Parral.