El Pentágono reflexiona sobre la posibilidad de mantener más soldados estadounidenses en Afganistán, tras el retiro previsto en 2014, afirmó el lunes un portavoz del departamento de Defensa.

Altos funcionarios estadounidenses sugerían, hasta ahora, que la administración de Barack Obama preveía mantener entre 8.000 y 12.000 soldados tras salida de la Fuerza Internacional de Afganistán (Isaf). Sin embargo, en un informe entregado la semana pasada, el ex Comandante de la Isaf, General John Allen, aconsejó dejar una “fuerza de relevo” integrada por soldados norteamericanos, por un período que podría ser de hasta tres años después de 2014. Es la primera vez que el Pentágono confirma que estudia esa posibilidad.

La coalición formó a unos 350.000 soldados y policías afganos, que supuestamente asumirían la dirección de las operaciones de seguridad y las Fuerzas Internacionales se limitarían a un papel de entrenamiento y apoyo, pero los afganos están siendo minados por un sin número de problemas, entre ellos la elevada tasa de deserciones, una débil organización y una flota de helicópteros frágil.

Washington está en plena negociación con las autoridades afganas sobre el mantenimiento de efectivos más allá de 2014.