El Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, dijo este lunes en Bogotá que el primer acuerdo logrado en La Habana (Cuba) entre su gobierno y la guerrilla comunista FARC, consiste en implementar una ‘reforma rural integral’ durante los próximos años en el país.

Durante el anuncio de Francisco Estupiñán como el nuevo ministro de Agricultura, en reemplazo a Juan Camilo Restrepo, el mandatario celebró que el domingo por “primera vez en la historia de nuestro país el gobierno y FARC llegan a un acuerdo”, sobre desarrollo rural integral.

Las dos partes negocian desde el 9 de noviembre de 2012 en la capital cubana una salida pacífica al conflicto armado entre el Estado y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), con 48 años de sangriento combate armado.

Santos señaló en su sede presidencial, Casa de Nariño, que para “reversar los efectos del conflicto en el territorio y también impedir que el conflicto se repita” se acordó “cambiar de manera radical las condiciones en el campo” mediante la implementación de una “reforma rural integral”.

En este sentido, precisó que esta reforma se fundamentará sobre cuatro pilares. El primer de estos consiste en “distribuir tierra a los campesinos sin tierra, o los campesinos con tierra insuficiente”, mediante la “creación de un gran fondo de tierras que les permita vivir en condiciones de dignidad”.

El segundo pilar es el “establecimiento de programas especiales de desarrollo” para “reconstruir las regiones más afectadas” a través de “grandes intervenciones del Estado para que las instituciones trabajen de la mano con las comunidades y se logre estabilizar esas regiones”.

El tercer pilar incluye “planes nacionales en toda la Colombia rural en materia de educación, salud, vías, riego, agua potable, vivienda, protección social, que logren -en una etapa de construcción de paz- una reducción radical de la pobreza y en especial de la pobreza extrema”.

El cuarto pilar es la “seguridad alimentaria y nutricional”, que según Santos, que el “esfuerzo de transformación del campo tiene que llevar a una mayor producción de alimentos y a una mejor nutrición, en especial de los más pobres. Para eso estableceremos programas especiales contra el hambre”.

Delegados del gobierno colombiano y las FARC reanudarán las conversaciones el próximo 11 de junio en La Habana, donde pretenden discutir respectivamente la participación política de la guerrilla, el tema de las drogas ilícitas, el abandono de las armas y la reparación a las víctimas del conflicto.

Las FARC, fundadas en 1964 tras una insurrección campesina, es la principal guerrilla de Colombia y la más antigua de América Latina, con unos 8.000 combatientes en la actualidad.