El ejército sirio utilizó armas químicas contra las fuerzas rebeldes que controlan algunos suburbios de Damasco, según dos periodistas del vespertino francés Le Monde presentes en el lugar en abril y mayo y cuya crónica se publicó este lunes.
Los enviados especiales del rotativo “fueron testigos varios días seguidos” de la utilización de explosivos químicos y de sus efectos en los combatientes del frente de Jobar, un barrio a la salida de Damasco en el que la rebelión entró en enero, relata el reportero Jean-Philippe Rémy.
El 13 de abril, el fotógrafo Laurent Van der Stockt vio a los combatientes rebeldes “empezar a toser y ponerse máscaras de gas”. “Los hombres se arrodillan, se ahogan, vomitan”, explica el periodista.
Los periodistas recogieron testimonios de la utilización de estos productos “en un sector mucho más amplio” alrededor de la capital siria.
En un video filmado por Van der Stock que se puede ver en la página web del periódico, combatientes rebeldes y médicos cuentan los síntomas provocados por esos productos: dificultades respiratorias, dolores de cabeza, pupilas contraídas o náuseas.
“Si no se trata inmediatamente, significa la muerte” de la persona expuesta, indica al periódico, pidiendo el anonimato, un médico del hospital Al Fateh de Kafer Batna, en el foco rebelde de la región de Ghuta, en las puertas de Damasco.
Los médicos indicaron que tomaron muestras que están siendo analizadas.
“Los gases son utilizados en los frentes de manera puntual, se evita una dispersión masiva que constituiría fácilmente una prueba irrefutable”, escribe Jean-Philippe Rémy.
No obstante, el régimen de Bashar Al Asad niega la utilización de armas químicas.
El artículo cita también “una fuente occidental bien informada” según la cual el régimen sirio recurre “a mezclas de productos, como con gas antidisturbios [lacrimógeno], para confundir las pistas y la observación de síntomas”.
El miércoles pasado la ONU pidió una vez más a Damasco que dejara a sus expertos investigar en Siria la utilización de armas químicas.
También el miércoles, la subsecretaria de Estado estadounidense Wendy Sherman dijo a los congresistas que “la comunidad de inteligencia está de acuerdo, con diversos niveles de seguridad, de que se usaron armas químicas en pequeñas cantidades en al menos dos ocasiones en Siria”, pero no precisó qué bando las utilizó.
