El abogado de la madre de Michael Jackson acusó el lunes a la productora de conciertos AEG de poner sus ambiciones por encima del bienestar de la estrella, al iniciarse un juicio en el que la defensa anunció que “se verán cosas feas” sobre los hábitos del “Rey del Pop”.
Al iniciarse el juicio en Los Ángeles de Katherine Jackson contra AEG Live, el abogado Brian Panish dijo que la productora actuó con negligencia al contratar al doctor Conrad Murray para que cuidara del cantante antes y durante una serie de conciertos que éste iba a dar en Londres.
Murray, actualmente en prisión, fue condenado en 2011 por el homicidio involuntario del músico por proveerle una dosis fatal de sedante.
Citando la adicción a medicamentos y drogas de Michael Jackson, Panish dijo que “AEG ignoró las obvias señales de alerta y contrató al doctor Murray”.
De su lado, el abogado de AEG, Marvin Putnam, indicó que el caso va a exponer “cosas feas” sobre la estrella.
“Es un caso sobre lo que es público y lo que es privado; sobre lo que mostramos al mundo y lo que no queremos que el mundo vea jamás”, dijo en su alegato de apertura. “Con Michael Jackson, el público y el privado son dos mundos muy distintos”.
“Vamos a exponer cosas feas (…) No será una imagen bonita”, añadió.
Según el abogado de los Jackson, el interés de Anschutz Entertainment Group (AEG) era convertirse en el mayor productor de eventos musicales del mundo a través de los conciertos “This is it” que la estrella tenía previsto dar en Londres antes de su muerte en 2009.
“AEG tenía un problema y quería resolverlo. Y no le importó quién saldría perdiendo”, dijo Panish al comenzar el juicio, que durará más de tres meses. “Fueron despiadados. Querían ser el número uno a toda costa”.
“Michael Jackson, el doctor Conrad Murray y AEG Live, cada uno, tuvieron un papel en el resultado final, que fue la muerte de Michael Jackson”, señaló, agregando luego: “Pero sin AEG, nada de esto habría ocurrido”.
Katherine Jackson, de 82 años, entabló la demanda en nombre de los hijos de Michael Jackson: Prince, de 16 años, Paris, de 14, y Blanket, de 11.
Panish negó reportes de prensa según los cuales los hijos de Jackson pedían 40.000 millones de dólares en compensaciones e indicó que la cifra correcta es 1.500 millones, por los ingresos que dejarán de percibir debido a la muerte de su padre, entre otros.
Respecto a la compensación por la pérdida emocional, el abogado dijo al jurado: “Está en ustedes decidirlo”.
Los dos hijos mayores podrían ser llamados a testificar. También podrían ser llamados al estrado las estrellas Quincy Jones, Diana Ross y Spike Lee, así como las dos ex esposas de Jackson, Lisa Marie Presley y Debbie Rowe.
Incluso podría solicitarse que Murray testificara, pero éste dijo en una entrevista que no comparecerá en el juicio para evitar entorpecer los pasos de un recurso que presentó contra su encarcelamiento.
En el proceso también podrían salir a la luz las acusaciones de abuso infantil contra Michael Jackson, a pesar de que el cantante fue absuelto de todos los cargos en 2005.
Jackson murió en su mansión en Los Ángeles el 25 de junio de 2009 a los 50 años por una sobredosis de Propofol, administrada por Murray, para ayudar al autor de “Thriller” a lidiar con su insomnio crónico. El artista ensayaba entonces para 50 conciertos que iba a dar en Londres, organizados por AEG.
La madre de Jackson asegura que la empresa presionó mucho a su hijo para que estuviera listo para ofrecer los conciertos.
Pero AEG Live afirma que Jackson tenía un historial de abusos de medicamentos desde mucho antes de que conociera a Murray.