Dicen que los ojos son la ventana del alma, que una persona que mira limpiamente a los ojos de otro es alguien seguro, amistoso, maduro y sincero.

Mirar a los ojos de otra persona ayuda a descifrar una serie de códigos que no son fáciles de captar de manera simple. Cada movimiento que realizamos con nuestros ojos son una señal, lo que pertenece directamente al dominio de la neurofisiología.

Dependiendo del lugar hacia donde uno mire, se activan diferentes partes del cerebro.

El sitio español Muy Interesante, consignó las 4 cosas que evidentemente se pueden averiguar mirando a los ojos.

1. Cuánto alcohol consumes: Una investigación realizada por la Universidad Estatal de Atlanta en Estados Unidos, en un estudio que involucró a 12 mil personas, arrojó que los sujetos de ojos azules tienden a consumir mayor cantidad de alcohol que los que tienen los ojos oscuros. La razón, según los investigadores, se debe a que las personas con ojos de color marrón son genéticamente más sensibles a los efectos del alcohol.

2. Si eres curioso o no: Según un estudio dado a conocer en la revista Cognition, el psicólogo de la Universidad de Memphis, Evan Risko, indicó que el nivel de curiosidad de una persona, se puede cuantificar analizando el movimiento de sus ojos al contemplar una serie de imágenes.

3. Si sufres de alguna enfermad a la piel: Nature Genetics realizó una investigación, en donde se señala que a partir del color de ojos de un individuo se puede predecir qué enfermedad cutánea puede padecer. Las personas de ojos marrones son menos propensas a ser víctimas de un melanoma y la de ojos azules presentan menos posibiliadades de contraer vitiligo, enfermedad que causa la pérdida de pigmentación en la piel formando manchas blancas en la cara, pies, manos y rodillas.

4. Tu personalidad: El profesor de la Universidad Orebro en Suecia, Mats Larsson, concluyó en un estudio que las personas con más criptas en el iris (filamentos ondulados que irradian de la pupila), tienden a ser más honestas y sensibles. Además indicó que los pliegues concéntricos alrededor del iris son más abundantes en personas impulsivas y nerviosas.