El intendente de la Región Metropolitana, Juan Antonio Peribonio, atribuyó el caos vial en la capital a la gran cantidad de agua caída en hora punta del tráfico santiaguino, los cortes de suministro eléctrico, colisiones menores por alcance y las compras navideñas.
La autoridad regional explicó que la mayor congestión se produjo en el sector oriente de Santiago, abarcando las comunas de Providencia, Las Condes y parte de Vitacura, donde los automovilistas debieron esperar hasta 4 horas para llegar a sus destinos.
“Estamos viviendo una situación inusual, excepcionalísima, pero la situación tendería a normalizarse a partir de las 22 horas, gracias también a que la lluvia comienza a declinar”, indicó el Intendente.
Agregó que “en general cuando caen entre 10 a 20 milímetros de precipitaciones, la ciudad las soporta, pero hoy se han conjugado factores que han provocado esta situación muy lamentable. Un desastre lo que han producido estos fenómenos de la naturaleza, unidos a otros factores que no estaban previstos”.
Peribonio afirmó que la empresa Chilectra trabajaba en la reposición del servicio eléctrico que registró cortes principalmente en sectores de Ñuñoa, La Reina, Puente Alto, Quilicura, San Miguel, Recoleta y Las Condes, donde los semáforos apagados ayudaron a aumentar los tacos.